Anda revuelto el cotarro de la diplomacia internacional por la masiva filtración de documentos en Wikileaks; una web de máxima actualidad, en la que se cuelgan documentos filtrados a la organización que la gestiona y que asegura que su objetivo es dar a conocer documentos que los países consideran secretos. El primer golpe de efecto de la web, http://cablegate.wikileaks.org/articles/2010/Wikileaks-empieza-a-publicar.html, fue la publicación de documentos de la guerra de Irak y de Afganistán, lo que puso los pelos de punta y en pié de guerra a las autoridades de EE.UU, que veían al descubierto sus documentos más secretos y también sus vergüenzas.
Son ahora nada menos que 250.000 documentos que han sido filtrados esta semana y que tocan a las relaciones internacionales de EE.UU... Que las embajadas americanas, como las de cualquier país, son máquinas de recoger información de donde trabajan, era un secreto a voces que ahora está contrastado con los documentos al descubierto. Que cada país va a lo suyo y que las opiniones que se vierten son, cuando menos, curiosas y despectivas, es algo que se suponía, pero que ahora es evidente. Es de esperar que el resultado final no sea un enfrentamiento diplomático masivo, que sería el fruto de una torpeza clamorosa a la hora de custodiar la información.
Que la embajada americana cuente que Zapatero llegó al poder por la mala gestión que el PP hizo del 11M, no aporta nada nuevo. Tampoco que se diga que el Rey tiene más prestigio que el Gobierno, o que Zapatero es un izquierdista trasnochado y cortoplacista. Si para hacer informes de tanta profundidad es para lo que sirven los servicios diplomáticos americanos, lo que produce no es temor, sino vergüenza; porque en lo que se refiere a España, son una colección de obviedades que sólo pueden inquietar por la incapacidad que han tenido para custodiar documentos que nunca debieron ver la luz.
Otra cosa es lo que pasa con las zonas calientes de planeta, como el Golfo, la carrera nuclear o las relaciones con Rusia. Aquí si que hay opiniones comprometidas y revelaciones que pueden poner las cosas muy difíciles, cara a la distensión o la progresiva desnuclearización de países que se han lanzado a por el armamento nuclear.
Hillary Clinton ha puesto el grito en el cielo y dice que se trata de un ataque a la Comunidad Internacional. No, de lo que se trata es de un fracaso absoluto del Departamento de Estado americano, que es incapaz de custodiar informes que seguro que son necesarios, pero que por el carácter interno y por la seguridad que comprometen sus contenidos, deberían ser salvaguardados de la opinión pública.
No hay que equivocarse y culpar de todo al mensajero. No es culpable quien los divulga, puesto que su contenido es de indudable interés mundial, es culpable quien es incapaz de guardarlos y quien tiene acceso a ellos y los filtra con una evidente irresponsabilidad, o una evidente intencionalidad. Estados Unidos presume de ser la primera potencia del mundo, pero también muestra agujeros que le cuestionan y le pone en el más absoluto de los ridículos. Los sofisticados sistemas de seguridad son tan vulnerables, que parecen más propios de los agentes de la T.I.A, nuestros Mortadelo y Filemón. Claro que con ellos nos reíamos y hemos pasado muy buenos ratos, mientras que con lo que estamos viviendo, las risas son las menos y los ratos, de buenos no tienen nada...
Lo que es evidente es que las nuevas tecnologías son esenciales para el desarrollo de los pueblos y para la comunicación, pero pueden convertirse en un juguete diabólico que globaliza todo y que escapa a cualquier intento de atadura. Ello impone a los Gobiernos ser más cautos, trabajar con más profesionalidad y seleccionar muy bien, mucho mejor de lo que se hace, a los leales, porque sólo en la lealtad está la verdadera seguridad. Y ésta, es una norma vigente para cualquier faceta de la vida que nos convendría recordar más a menudo.
miércoles, 1 de diciembre de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No le vienen mal a la soberbia americana estas curas de humildad.Se creen el centro del mundo y no se dan cuenta que pueden ser los más chapuzas.Lo que sorprende de verdad es que no rueden cabezas entre los que mandan en el Departamento de Estado,que son quienes tienen la obligación de velar por estos asuntos que afectan al orden mundial.
ResponderEliminarAlgo de culpa tiene Mireia el mensajero.Lo tiene porque esto es un negocio puro,como lo demuestra el acuerdo que ha alcanzado la web con cuatro o cinco medios de comunicación del mundo.El resto tienen que leer la web.Desde mi punto de vista hay documnentos que no aportan nada,como son los que cuentas sobre España,pero sin embargo se dan a El país,porque ha comprado la exclusiva para España.Esto es como el tráfico de obras de arte o cualquier otro asunto que sólo busca el enriquecimiento de sus autores.Mal que no se vigilen los documentos,pero no es ético tensar la situación en zonas que tu denominas calientes del mundo.
ResponderEliminarYa es sospechoso que el periódico que de este asunto en España sea El país y que lo situe por delante de las elecciones catalanas.Otra vez el País,que sabe que tiene una gran influencia en España,trata de marcar la actualidad y desviar la atención sobre el desastre del psoe en Cataluña o sobre el hundimiento de la bolsa o de las advertencias que la Unión Europea está haciendo a España.No descartes Mireia que todo esto sea una operación que respalda Zapatero para distraer la atención aquí,porque lo que los documentos dicen de España es ridículo.
ResponderEliminarEs verdad que es un asunto muy importante a nivel mundial,poero sinceramente pienso que en España pasamos de esto porque tenemos problemas que nos afectan mucho más directamente y que son los que nos preocupan.La política internacional nunca ha sido una prioridad en la mente de los ciudadanos y mucho menos ahora que lo que nos preocupa es como están los bolsillos y como llegamos a final de mes.Los americanos nos interesan para el cine y esto lo único que nos dice es que no son tan fuertes como se creen.
ResponderEliminarNada como matar al mensajero Mireia y por eso los conservadores estadounidenses quieren declarar a la web como organización terrorista.Lo que deberían de hacer es guardar mejor sus secretos de estado y como muy bien dices tu,rodearse de leales,personas que mantengan una integridad a prueba de bombas.No es la primera vez que se producen estas piteras en la seguridad yanki,por lo que es una muestra muy evidente de que no se han tomado las medidas adecuadas.Hay que mirar más hacia adentro y menos tirar contra los de fuera.
ResponderEliminarUn saludo Mireia.
A mi me suena todo esto a película de espias,pero unos espias un poco chuscos,porque no se descubre un documento secreto, sino 250.000 cables enviados por las embajadas,un envío masivo puesto al descubierto.Esto ya no es lo que era,porque antes era el microfilm,a la cápsula en el diente del espia.Ahora se lo baja uno de internet y se acabó la emoción.No da ni para hacer una película americana,que con eso por lo menos podrían sacar un poco de rentabilidad al asunto.
ResponderEliminarTodos sabemos -o suponemos- que todo país y estado tiene sus cloacas, pero... ¿en qué nos redunda saber su detallada topografía?
ResponderEliminarHay gente que está en peligro -no estando en el poder- que hace la fontanería que permite que nuestra vida sea "aséptica".
Sinceramente, nos la debe traer floja saber lo que ya suponemos.
Saludos.
Fdo.: J.Robles.
Tienes razón Robles que todos los estados tienen cloacas abiertas y que conocer lo que hay en ellas no es plato de gusto.Lo que sucede es que yo creo que porque son cloacas,es por lo que hay que preservar que no hable de ella y que su "mierda" esté bien guardada y controlada.Lo que hay que hacer es echar a quién no hace bien su trabajo y está visto que los custodios del asunto no han sido precisamente precavidos.A mi me la trae floja lo que dicen los papeles dichosos,pero no que hayan visto la luz,eso si me preocupa bastante.
ResponderEliminarSaludos
Sí. Eso último que dices, Juanjo, es lo grave.
ResponderEliminarSaludos.
Fdo.: J.Robles