BLOG DE MIREIA ARROYO DE LA PARTE

Un vistazo crítico y personal a la actualidad.

viernes, 31 de diciembre de 2010

Acaba 2010...¡Feliz 2011!

Apenas unas horas y las campanadas darán la bienvenida al 2011. Tomaremos las uvas, brindaremos con cava y expresaremos nuestros mejores deseos... Es la anual ceremonia de conjurar lo que pudo ser y no fue, lo que pudimos hacer y no hicimos, lo que sufrimos y tal vez no deberíamos haberlo hecho. Dejamos atrás capítulos de nuestra vida, de nuestra pequeña y particular historia, para continuar otros y para abrir nuevas expectativas.
Es verdad que todos tendemos a hacer en estas horas finales un balance. ¿Qué hemos hecho? ¿Qué deberíamos haber hecho? ¿Qué deberíamos no haber hecho?... Son preguntas recurrentes que, sinceramente, no sé si deberíamos hacernos. Pero somos humanos y necesitamos referentes para emprender nuevos caminos, para seguir con proyectos que están ahí y que debemos acabar para sentirnos bien con nosotros mismos y para con nuestra sociedad.
Se va un año para olvidar en lo político, porque se ha disparado el paro, se cierran cientos, miles de pymes, se dispara la deuda, se cuestionan las pensiones y no hay hueco para la alta política. Hubo huelga general, nos llamaron la atención en el mundo entero, se disparó la gasolina, la deuda, se recortaron los sueldos.... y así un largo etcétera que sólo palió el brillante triunfo en la Copa del Mundo de “La Roja” o las gestas de Nadal o del Barça... Pero hasta en el deporte el año se cierra con mal sabor de boca de un posible positivo de Contador, el flamante vencedor del Tour o la operación Galgo que implica a nuestra Marta Domínguez, uno de los mayores mazazos para el orgullo patrio.
¿Y Zapatero?... Pues se cierra su annus horríbilis, el del desplome de su popularidad y de las encuestas, el del varapalo de las elecciones catalanas, el del final de su “progresismo social”. En el Gobierno, sólo Rubalcaba brilla como estrella rutilante en un cielo obscuro y algo tenebroso, que aventura una campaña electoral difícil y sin demasiada limpieza.
En las últimas horas Zapatero y Rajoy han hecho balance del año y parece que aproximan posturas. Pese a ello, sus análisis son diametralmente opuestos. Para Zapatero este es el Gobierno de los avances sociales. Rajoy ha tardado segundos es desmontarlos. Basta el dato del paro para poner en evidencia el carácter social de un Gobierno cuyas políticas, o falta de políticas, destruyen un importantísimo número de puestos de trabajo. No cuela el optimismo compulsivo de Zapatero, del que ya una mayoría de españoles está harto y que, desgraciadamente, se repite de forma cansina. Zapatero en 2010 ha sido un político noqueado y lo que es más dramático, escondido. Se ha parapetado en Rubalcaba y Blanco para intentar capear un temporal que no despeja. Hizo una crisis de Gobierno para que todos fueran portavoces del Gobierno y el desastre se multiplicó por 15. Tenemos un Gobierno sin prestigio, incapaz de dar confianza a los ciudadanos y a los mercados y que sigue trabajando en una política cortoplacista que tardaremos años en superar.
Escribo estas críticas con pena, porque lamento tener que decir estas cosas de mi Presidente, porque aunque Zapatero no ha sido capaz de entenderlo, es el Presidente de todos los españoles y todos sabemos que si a él y a su Gobierno le va bien, nos irá bien a todos... Por eso es un error pensar que la crítica por la crítica es tarea de oposición. La crítica debe ser fundada y los hechos en España "cantan". Cuando por toda defensa, el Gobierno dice que lo que pasa es culpa de Aznar, y él lleva gobernando legislatura y media sin solucionar nada, es que se han acabado los argumentos.
Vuelvo al principio. Restan unas horas para que llegue 2011. No son buenas las perspectivas, pero necesito creer que es posible el cambio y sobre todo la recuperación. Hace falta poner bases sólidas para crear puestos de trabajo y llevar esperanza a las familias. Hace falta dar confianza a la sociedad. Hace falta un cambio político, con las municipales y autonómicas, que auguran un desastre para el PSOE. Si eso se produce, será el comienzo del cambio. Ya es lamentable que para que se produzca tenga que llegar la debacle de un partido... Pero es el camino elegido por este Presidente.
No tenía intención de hablar mucho de política, pero la actualidad manda: comienza un nuevo año. Lo que hemos contado durante estos meses esta aquí, en el archivo del blog. Ha sido posible porque me habéis ayudado, me habéis estimulado, también me habéis apuntado, criticado y enseñado muchas cosas... Gracias a todos vosotros, más de 50.000 lecturas en este año; he sentido la fuerza necesaria para escribir sobre la actualidad. Os debo mucho y hoy quiero daros las gracias más sinceras. Lo hago con el corazón y con el reconocimiento de que este blog no sería una realidad sin vuestro apoyo... Alzaré esta noche mi copa por todos. ¡¡¡Feliz 2011!!! Seguiremos, porque el año traerá muchas cosas nuevas que contar. 

viernes, 24 de diciembre de 2010

Feliz Navidad, desde lo más íntimo...

Cuando en 1818 Grüber firmaba la partitura de “Noche de Paz” no era consciente de que estaba escribiendo una página de la historia de todos los ciudadanos del mundo. Ponía música a una composición de Mhor que ha sido traducida a 300 idiomas. Es la letra, la música y el significado de una noche mágica, universal, que para nosotros tiene la base de la creencia del Nacimiento; pero que para el mundo entero es la noche en la que todo se detiene, en la que algo pasa en la tierra, en la que nuestras vidas bajan la tensión del día a día y nos entregamos a las vivencias a los recuerdos a las emociones...
Hemos llegado un año más a los días centrales de la Navidad. Llegamos cansados de tanta tensión, tanta crisis, tanto desgaste... Esta noche, cuando la inmensa luna llena que ayer brillaba en nuestros cielos, ilumine cada una de nuestras ciudades, estaremos viviendo un año más el milagro de cada Navidad.
¡Qué verdad es que la Navidad es la fiesta de los niños!... Por eso la tenemos tan dentro de nuestro corazón; porque cuando fuimos niños, pudimos disfrutar de momentos maravillosos e irrepetibles que jamás olvidaremos y que nos acompañarán hasta el final de nuestros días. Luego, cuando crecimos, cuando perdimos la inocencia, disfrutamos de todo lo que nos rodeaba con un amor y una fuerza, que parecía increíble que un día pudiera perderse...
Quienes tenemos familias pequeñas, disfrutamos también de una Navidad entrañable, en la que había espacio para hablar de las cosas de casa, donde había tiempo para los regalos, para las miradas cómplices, para sentirnos queridos y amparados. Noche de Paz en casa, con mi padre y mi madre, con los abuelos, mis tíos y mis primas, luego llegaron los primos... Noche inolvidable metida en el corazón y en el alma de niña, que disfrutaba escuchando historias, preparando la mesa bajo las indicaciones de mi prima Carme, dando los primeros pasos en una cocina donde reinaban la Tieta, mi madre y la madrina. Tiempo de hablar y de escuchar, de aprender, de agarrar la mano cálida de los abuelos, manos que lo daban todo y que registraban la huella del paso de los años, del trabajo intenso desgranado y del calor humano de los seres más queridos..., más añorados.
Tiempo de recuerdo que inunda nuestro corazón y que nos hace volver la vista atrás. Tiempo de recuerdo que me devuelve lo que más quería, lo que más necesitaba, lo que jamás imaginé que causara tanto dolor perder, tanta pena... Esta noche, cuando estemos en casa, cuando la familia cumpla con la cita de cada Navidad, tú estarás presente. En realidad no te has ido nunca, porque no hay ni un solo día que no te piense, que no te sienta...; tus enseñanzas, tu ejemplo, permanecen vivos en mi y son mi guía en el día a día. Y cerraré los ojos y volveré a escuchar la palabra de sereno castellano, te veré sonreír, tranquilo... y sentiré de nuevo esa complicidad de padre e hija, que sigue ahí porque viajas conmigo...
Esta noche, cuando estemos todos juntos, cuando haya huecos que no se cubren, cuando haya miradas cruzadas, cuando otros presidan la mesa, cuando los que ahora formamos la familia nos sintamos más unidos, saborearemos de nuevo la Navidad. Estamos aquí y tenemos que saber vivirlo. Se lo debemos a quienes nos enseñaron, a quienes nos lo hicieron vivir...Y será motivo de alegría... y los recuerdos volverán ese rincón de nuestro corazón, pero lo harán para seguir dando fuerza y energía a nuestro motor vital. Son esa parte de nuestra vida que nadie jamás podrá arrebatarnos y que nos ayudan a afrontar tantos reveses.
Ya está aquí la Navidad. Navidad para todos, tiempo de familia y de amigos, de reencuentro con los nuestros... Hoy he querido echar un vistazo a mis recuerdos, a mis emociones, porque hoy los protagonistas somos cada uno de nosotros, cada familia, cada persona... En estas líneas y con el tono intimista que genera esta noche, quiero felicitaros desde lo más profundo de mi corazón, desde el reencuentro con mis orígenes y desde el agradecimiento por estar ahí y seguir cada día las palabras de quien hoy se dispone a vivir un año más...la Navidad.

jueves, 23 de diciembre de 2010

No doy "crédito".

Es evidente que el proyecto europeo ha unido en España y tal vez por ello, ayer lo recuperó Zapatero como hilo conductor de su intervención en el Congreso; para buscar los puntos de confluencia de los grandes partidos, y tratar así de llegar a acuerdos que permitan salir de la crisis en la que estamos instalados. Hacen falta al menos cinco años, son palabras de Zapatero, para remontar los desequilibrios que se han producido en España, y para ello pidió trabajo en equipo.
Su discurso fue impecable. Nada que objetar. Además, es justo reconocer que hizo un dibujo acertado sobre las reformas estructurales que hay que acometer: la reforma de las pensiones, la estabilidad financiera, el pacto energético, la colaboración con las comunidades autónomas acabando con las duplicidades y la consolidación del estado del bienestar. Todo era perfecto en el que consideramos primer día de la Navidad, máxime teniendo en cuenta que el líder del PP, Mariano Rajoy , tendió la mano para apoyar en todo lo que sea necesario para la consolidación y fortaleza del euro.
El carácter idílico y racional de la sesión, se rompe porque la persona que hace las propuestas no tiene crédito, se le ha acabado y además, es el origen de los grandes problemas que ahora se propone afrontar. Zapatero, que negó la crisis desde un principio, no tiene fuerza moral para hablar de mecanismos para lograr la estabilidad financiera o del mantenimiento del estado del bienestar, porque ha sido el político que ha disparado la deuda, que ha derrochado las arcas públicas y que ha llegado, en el paroxismo de la antología del disparate político, a regalar 400 euros a cada ciudadano del superavit de la caja. Se cuenta y no se cree, que como había superavit dinerario, regaló a cada ciudadano, lo necesitara o no, 400 euros, en una operación que sirvió para vaciar en miles de millones las cuentas del país. Y a partir de ahí, podría volver a enumerar las improvisaciones y desmanes de los últimos años, que sólo fueron frenados por la imposición de los líderes mundiales, que asistían atónitos al desgobierno socialista que había en España... Es verdad que desde entonces, a regañadientes, Zapatero ha comenzado a hacer tímidas reformas; pero lo ha hecho con un país agotado, en serio peligro, con un prestigio internacional deteriorado y con los rumores de una intervención en ciernes... No está de más recordar que el PP advirtió desde todos los frentes la situación de crisis y aportó soluciones, algunas de las cuales se adoptan ahora, pero Zapatero no hizo ni caso.
No creo que la situación de España sea tan mala, la verdad. Estamos en un escenario de crisis global que exige decisiones firmes y valientes, decisiones arriesgadas políticamente y que implicarán sacrificios importantes de los ciudadanos. La situación es dura, porque hay que solucionar el problema de casi cinco millones de parados y subiendo, de un sector de la construcción muerto, de una industria que necesita una mayor competitividad y de unos jóvenes que cada vez ven más complicado acceder al mercado de trabajo. Las soluciones sólo pueden llegar con un ajuste del cinturón y desde la confianza. Zapatero no es la persona indicada para sacar adelante el proyecto, porque no genera confianza. Nadie se fía de él y para que nada falte, va y abre el melón de la sucesión en su partido, con el rocambolesco episodio del secretito sobre su la decisión de futuro, que sólo conocen su esposa Sonsoles y un allegado del PSOE, probablemente José Blanco... Dicen en el PSOE que si Zapatero ha dicho eso, es porque sabe que no repetirá, y también dicen en el partido, que lo que tenía que hacer es dejar la presidencia en manos de Alfredo Pérez Rubalcaba, que es más listo, más brillante y que no es nada amante de las improvisaciones.
España se la juega en el próximo lustro. Se la juega internamente y en el escenario internacional. Zapatero pide ahora el apoyo del PP, partido al que ningunea en cuanto puede y al que siempre margina con la compra del apoyo de los nacionalistas. Con esos antecedentes es imposible fiarse de su palabra. Es decir, no tiene crédito, se le ha agotado y por ello lo más sensato es que pida el relevo o convoque elecciones... La decisión le corresponde sólo a él. Es decir, que debe tomarla quien en numerosas ocasiones se ha encargado de dinamitar las reglas del juego.

miércoles, 22 de diciembre de 2010

Y los bombos giran un año más...

Cuando en 1812, para mejorar los ingresos de las arcas públicas, se ponía en marcha la lotería nacional, sus impulsores no eran conscientes de la fiebre que desataban. Ponían en marcha, no sólo un mecanismo para mejorar la situación de la hacienda pública, sino que acababan de poner en funcionamiento la gran máquina de la ilusión... Fue el 18 de diciembre de aquel año cuando se celebró el primer sorteo, el precursor del “gordo de navidad”, que no contó con bombos y bolas hasta 1892. En el sorteo celebrado el 23 de diciembre de aquel año, se empleó por primera vez el sistema que hoy se sigue utilizando.
Mucho han cambiado las cosas en la larga historia de la trayectoria del sorteo más popular del año. Sus cifras hoy son difíciles de imaginar, ya que se emiten 195 series de cada uno de los 85.000 números que entran en sorteo. Nada menos que 3.315 millones de euros pueden jugarse los españoles, que pueden obtener 26 millones de premios por un importe de 2.320,5 millones de euros. Es decir, que Hacienda podría ganar en la operación del sorteo de Navidad 994.5 millones de euros, lo que no está nada mal... El negocio es de tal calibre, que el Organismo Nacional de Loterías se ha convertido en una de las "joyas de la corona" y por eso el Gobierno prevé privatizar un 30%, lo que puede aumentar los ingresos públicos, pero también la competitividad en los puntos de venta.
La Lotería de Navidad es mucho más que un juego de azar. Es ya una tradición que une a casi todos los españoles porque, aunque no es el sorteo que mayores cuantías adjudica en los premios que no son los gordos, es la más difundida y se ha convertido en un hecho social. Nos intercambiamos las participaciones o los décimos y esperamos disfrutar en sociedad de los grandes premios. De alguna manera, el sorteo marca el comienzo de la Navidad y trae el espíritu que debe de reinar estos días.
Hubo un tiempo, allá por los 60 y los 70, en el que este sorteo hacía millonarios. El aumento del nivel de vida ha hecho que las cosas sean hoy muy diferentes, y una gran mayoría de los españoles juegan a la lotería de Navidad para tapar huecos, para pagar el plazo del coche o de la hipoteca, que son los mayores quebraderos de cabeza de muchas familias.
A pesar de que estamos en tiempo de crisis, no aumenta la venta de lotería, porque hasta en esto se retrae el consumo. Cada español juega de medida 6 décimos, es decir 120 euros, un 9% menos que el pasado año. Incluso nos gastamos menos en lotería que en los regalos y el consumo de estos días, ya que los últimos estudios dicen que cada español nos vamos a gastar estas navidades 674 euros en regalos, cenas, lotería, etc..., un 7,4% menos que el pasado año. Tenemos pues, una muestra evidente de que el consumo está en caída grave y se ha demostrado de una forma práctica en los últimos domingos, donde el comercio minorista declara que la campaña de Navidad no va nada bien.
Estos datos son reflejo del espíritu que vivimos, de la falta de confianza que tenemos y de los irrefutables datos de una crisis que se ha instalado entre nosotros y que está dañando a las familias hasta límites que a veces no llegamos a imaginar. Cáritas asegura que atiende necesidades con unos incrementos que le desbordan, el paro sigue en caída libre y cada semana cierran un buen puñado de PYMES... Esta es la realidad de la Navidad del 2010 que nos preparamos a celebrar. Ojalá que cuando leáis este post, hayáis podido comprobar que vuestros números de la lotería han resultado premiados y sintáis que esos “agujeros” que tanto preocupan, tienen un retal que los va a tapar... Y ojalá que con la lotería y la Navidad llegue el buen espíritu, las ganas de hacer muchas cosas, el refuerzo positivo que necesitamos todos los españoles para remontar la crisis... y nuestras propias crisis... ¡Mucha suerte para todos!

martes, 21 de diciembre de 2010

Síntomas de la enfermedad.

No hay día que no tenga un revés para el PSOE. Ayer conocíamos los datos del Barómetro de la Opinión Pública de Andalucía, elaborado por el Instituto de Estudios Sociales de Andalucía (el equivalente al nacional CIS), que otorgaba una ventaja de nueve puntos al PP sobre el PSOE; lo que traducido en resultados electorales significaría que en junio del próximo año, no sólo se acabaría la hegemonía socialista de los últimos 30 años en Andalucía, sino que el PP podría ganar por mayoría absoluta. Hay más, porque el barómetro dice que el 70% de los andaluces quiere un cambio de gobierno y una mayoría prefieren que sea el PP y no el PSOE, quien ocupe las responsabilidades en el Palacio de San Telmo.
El PSOE fracasa porque lo que ha hecho en Andalucía en las últimas décadas no tiene nombre. El clientelismo, el amiguismo, el despilfarro y el caciquismo han llegado hasta lo más profundo de la sociedad andaluza, hasta el punto de que muchos dirigentes socialistas han considerado a esta tierra como su particular cortijo. Baste señalar que el pasado domingo un informe periodístico ofrecía datos de escándalo, como que de la Junta andaluza dependen 38.000 teléfonos móviles, o que su parque de coches oficiales es uno de los mayores de España con 300 vehículos, o que familiares de ministros del gobierno tienen un trato que denota hasta qué punto las cosas se manejan al antojo.
Un hecho demoledor es el denominado “funcionariazo”, la aprobación en el mes de agosto de un decreto ley de reordenación del sector público andaluz, con la intención de que pasara desapercibido, y que abre la puerta a los amigos hasta el punto de que hay quienes hablan de 20.000 enchufados que acceden al sector público por la puerta de atrás, algo que indigna a funcionarios y sindicatos. En pocas palabras para muchos es como legalizar la administración paralela de amigos y colocados...
Lo que está pasando en Andalucía pone de manifiesto que las perspectivas para el PSOE son casi dantescas y por ello se acometen reformas para dejar “reordenadas” algunas cosas. Las encuestas señalan que los andaluces rechazan masivamente las medidas de Zapatero y que están dispuestos a propiciar el cambio. Sin Cataluña y sin Andalucía, el desastre socialista está garantizado. Y Zapatero sigue escondido, sin dar soluciones efectivas, y sólo propiciando tímidas reformas que además son consideradas cortas por parte de los gobiernos europeos que nos vigilan... Y mientras tanto, asistimos a situaciones que sólo los bien pensados calificarían como “curiosas”, pero que sabiendo lo que está pasando tienen una clara intencionalidad. Hablo de la fiebre viajera que ha entrado en el Gobierno para visitar a nuestras tropas en misiones exteriores. Si el domingo quien visitaba a los militares era el mismísimo Rubalcaba, ayer lo hacía Carme Chacón, de quien se dice que estaba molesta por el ninguneo del Vicepresidente y por eso quiso dejar claro quién es la Ministra del ramo. Zapatero parece que ni está ni se le espera, y son muchas las señales que apuntan a que Rubalcaba está en promoción, fomentando su imagen y actuando cada vez más como Presidente. Dicen las malas lenguas que está ensayando una eventual marcha de Zapatero si las cosas se ponen imposibles... Llamadme malpensada, pero ni por esas se soluciona la debacle que prevén muchos socialistas. Vaya final de año les espera...

lunes, 20 de diciembre de 2010

Todo lo que nos une, bienvenido sea.

Tiene toda la razón José Luis Rodríguez Zapatero: cuando se suman esfuerzos y se trabaja de forma conjunta, se pueden alcanzar grandes éxitos. Lo dijo el sábado con motivo de la inauguración del AVE entre Madrid y Valencia, una infraestructura clave que arrancó allá por 1999 y que desde el sábado une las dos ciudades en 95 minutos. La inauguración de esta nueva línea de AVE es la mejor noticia en España en muchos meses. Es el resultado de un trabajo bien hecho, de una racionalización de los recursos y de una planificación que demuestra que lo que se proyecta bien, acaba bien... Por eso las palabras de Zapatero han de ser tenidas en cuenta, aunque yo tengo la sensación que esta es otra de las florituras del Presidente, porque el seguimiento de su trayectoria política al frente del Gobierno, no se puede decir que se haya caracterizado por buscar la colaboración de todos para sacar adelante proyectos.
Trabajar conjuntamente no es despertar el fantasma del pasado con la memoria histórica. Tampoco lo es venderse a los nacionalismos para no tener que sentarse con el grupo mayoritario de la oposición para los grandes asuntos de Estado. Ni mucho menos que ante las advertencias reiteradas de la oposición de que había que prevenir una crisis, se negara sistemáticamente su existencia. O que cuando se adoptan medidas para luchar contra ella, se nieguen las aportaciones del adversario y sólo se asuman como propias cuando las impone Europa. Así podría seguir en un sinfín de asuntos que se han sacado adelante durante las dos legislaturas de Zapatero, bajo el amparo de que son conquistas sociales y que realmente sólo son cesiones a determinados grupos con el fin de conseguir el apoyo electoral de esas minorías.
Si la inauguración del AVE y las palabras de Zapatero sirven para reconducir situaciones y buscar la senda del diálogo y la colaboración, bienvenida sea; porque España necesita en estos momentos que el consenso y el acuerdo dominen la vida política y las medidas económicas que hay que tomar.
España es el segundo país del mundo en kilómetros de alta velocidad ferroviaria y el primero de Europa, y están en ejecución las nuevas líneas a Galicia, Asturias, País Vasco, Extremadura y la conexión francesa. Es evidente que el trabajo desarrollado por los sucesivos responsables del Ministerio de Fomento ha sido francamente bueno en el desarrollo del ferrocarril, un medio de que se perfila ya como imprescindible y más en el futuro. Baste señalar que se calcula que cuatro de cada diez viajes entre Madrid y Valencia se harán en AVE. Es rápido, es seguro, es limpio y sobre todo está alejado de las incomodidades de las carreteras (los atascos) o de los aviones (los trámites en el aeropuerto). Tiene todas las ventajas para ser cada vez más demandado. El flujo de viajeros que genera tiene importancia no sólo en el mundo de la empresa, también en el sector turístico, uno de los que más valor añadido generan a nuestro PIB. Y yo añado otro de los grandes beneficios que puede aportar la red de alta velocidad: al acortar tanto el tiempo de los viajes, permite una mayor movilidad entre las comunidades autónomas, en viajes rápidos y relacionados con el ocio. Eso debe traducirse en que nos conozcamos un poco mejor y que superemos atavismos que ha creado la política y que carecen de sentido. Unir para conocernos mejor, para acercarnos, para profundizar en lo que nos une, para saber que somos miembros de un gran país que puede tener un gran futuro. Somos los ciudadanos de a pié los que podemos dar un magnífico ejemplo de solidaridad y civismo, frente a las posiciones de políticos extremistas que consiguen su subsistencia a base de dividir y acrecentar la distancia. Todo lo que nos una, bienvenido sea.

viernes, 17 de diciembre de 2010

Puntualizo...

Me gustaría puntualizar que no he tratado de frivolizar en la última parte de mi artículo incitando al consumo. Me considero una persona muy afortunada porque tengo trabajo y puedo llegar a final de mes. Trato de cumplir con el esfuerzo diario y el ejercicio responsable de la obligación. Soy afortunada porque puedo hacerlo, porque hay millones de españoles trabajadores y responsables que no pueden trabajar, porque no hay trabajo. Su situación es dramática y soy consciente de que para ellos puede resultar especialmente dolorosa la llamada al consumo. Ellos, precisamente, son mi primer pensamiento cuando critico la incapacidad de luchar contra la crisis... Sólo trataba de decir que aquellos que somos afortunados y podemos, debemos poner nuestro granito de arena para la dinamización del consumo y con ello aliviar los cientos, miles de pequeñas empresas que lo están pasando muy mal. Mis disculpas si pude haber ofendido a alguien al invitar a la compra de regalos esta Navidad... Nada más lejos de mi intención.

Todos somos economía.

Una puede ser una optimista convencida, pero eso no significa que esté ciega. Puedo aplicar la máxima de ver siempre la botella medio llena, pero a menudo la actualidad me lo pone muy difícil… He repasado lo acontecido en los últimos ocho días y he comprobado que si me ciño estrictamente a la actualidad puedo ser muy repetitiva. Lo peor de todo, es que ese repaso me permite comprobar que no hay buenas noticias, y que por mucho que lo intente una siempre tiene que beber en asuntos que hacen que tenga la sensación de que la cosa no pinta nada bien. Basta señalar que la mejor noticia de estos días, es que los ciudadanos tienen asegurado poder viajar con normalidad desde los aeropuertos españoles estas Navidades. Tiene miga que lo bueno sea una falsa normalidad, porque la garantía para viajar en avión estas vacaciones llega de la mano de una de las situaciones más anormales que se pueden dar en democracia: el estado de alarma.
Y a las malas noticias se unen las de los agoreros que ya nos anuncian lo que se nos viene encima. No, no hablo de nuevos problemas para el Gobierno que éste no va a ser capaz de resolver, sino de las temidas subidas de enero, en las que se habla de un incremento del 10% en el recibo de la electricidad... Si soy sincera, he de decir que este es un debate que me supera. No soy capaz de entender por qué en un país deficitario energéticamente tenemos que pagar energías renovables a precios elevadísimos, cuando somos incapaces de proponer un “mix” energético y de hablar seriamente sobre algo tan evidente como es el tema nuclear. Resulta que con la que está cayendo, al Gobierno le trae sin cuidado este debate y decide el cierre de la Central de Garoña a pesar de que el Consejo de Energía Nuclear dice que puede ser operativa sin riesgo. Me pregunto, ¿puede un país serio prescindir de la energía nuclear que es limpia, segura y barata por intereses estrictamente políticos?... Si es así, entonces no nos quejemos de que nos suban la luz para ir reduciendo el denominado déficit tarifario.
Otro asunto clave: las pensiones. Hay un acuerdo de mínimos en aumentar los años de cotización para calcularlas, lo que significa una bajada tácita de las mismas, ya que cuando más se gana es el los últimos años de vida laboral. Pero no se vislumbra acuerdo sobre el aumento de la edad de jubilación, y claro, nadie quiere asumir en solitario la medida, máxime cuando estamos a las puertas de unas elecciones… Pero como en este país estamos un día sí y otro también de elecciones, es muy difícil que los partidos se arriesguen a perder votos con un asunto tan sensible. Desde luego el mínimo acuerdo alcanzado saneará las arcas de la Seguridad Social, pero es suficiente para cargarse el diálogo social, porque los sindicatos no tragan.
Y luego está lo de Moody´s, que nos guste o no admirado Robles, es quien mide el grado de confianza que los inversores pueden tener en la deuda de un país y si nos castigan como lo están haciendo, nos ponen en una situación todavía más difícil. Es lo que hay.
Como podemos ver, no hay muchos motivos para alegrías… Bueno sí, estamos a las puertas del fin de semana y por tanto, del descanso. Las ciudades, a pesar de todo, están ya llenas de luz y adornos navideños, todo para intentar estimular el consumo. Todos somos parte de ese complejo engranaje que es la economía y si consumimos más, estaremos ayudando a levantar la cabeza al comercio. Puede ser un buen fin de semana para comprar los regalos navideños, porque este año (más que nunca) hace falta una felicitación a los seres queridos con un regalo responsable y dinamizador del consumo. Así que habrá que ponerse manos a la obra... Como veréis no he perdido optimismo y es que estoy convencida de que con una sonrisa no es que se resuelvan los problemas, pero nos podemos sentir mucho mejor.

jueves, 16 de diciembre de 2010

O recuperamos confianza, o la ruina...

Que la economía moderna es algo de difícil previsión, nos lo demuestran cada día los mercados. Los vaivenes son de tal calibre, que no hay manera humana de hacer previsiones a medio plazo. Lo que valen son los indicadores generales y la confianza en el país, y si estos no son favorables la cosa se pone muy fea. Aquí lo vemos cada día.
Lo pudimos comprobar ayer otra vez en España, ya que Moody´s volvió a poner nuestro país en el punto de mira para la revisión a la baja de la calificación de nuestra deuda, lo que se traduce en una menor solvencia de nuestro país y por tanto, en la retirada de confianza de los inversores. La situación es muy grave y puede que ahora sea incluso injusta, porque en los últimos meses España sí que ha tomado medidas para controlar y reducir el déficit, y han comenzado a ponerse las bases para promover reformas estructurales. Ayer se dio un paso de gigante con el principio de acuerdo entre el PSOE y el PP para reformar el sistema de pensiones, con un aumento del periodo de cálculo para la cuantía, lo que indica que bajarán para quienes se jubilen en los próximos años y con ello, un alivio económico importante para la Seguridad Social. No hay por el momento acuerdo en la edad de jubilación, pero todo parece indicar que finalmente se impone el sentido común de alcanzar acuerdos en temas clave. No lo entenderán los sindicatos, que pondrán el grito en el cielo y amenazarán con una nueva huelga general, lo que demuestra que son incapaces de entender que son necesarios cambios o el sistema no será viable.
Todos quisiéramos tener las mayores ventajas sociales, que pudiéramos disfrutar de bienes y servicios casi sin límite, pero la realidad es muy diferente. Hay menos cotizantes, menos consumo y en cinsecuencia menos ingresos. Si el dinero es limitado, también lo serán los servicios; porque nada, absolutamente nada, es gratis y todo hay que pagarlo. Pensar que podemos recibir servicios sin límite con carácter gratuito, sería ponerse una venda que nos saldría muy cara. Hemos disfrutado de un estado del bienestar que no vamos a poder sostener y por tanto debemos ponerlo en revisión.
Una sociedad moderna debe ser valiente y afrontar los cambios que sean necesarios para asegurar su viabilidad y su estabilidad. Una sociedad moderna es aquella que es capaz de afrontar sus reveses sin complejos... Sólo de ese realismo se verá la luz al futuro. La reforma de las pensiones era una urgencia; también lo es una reforma laboral valiente y moderna, el copago sanitario o la priorización, racionalización y optimización de las infraestructuras. Estas son recetas que no admiten demoras en ser afrontadas, porque cada mes que pasa sin hacerlo, son miles de millones que van a engrosar la deuda, el cáncer de nuestro mundo actual.
Y no podemos olvidar el estado descentralizado que tenemos, que ha engrosado la nómina pública de una forma importante, al tiempo que ha creado duplicidades innecesarias en muchos casos, y una especie de disputa irracional entre comunidades por pagar mejor a sus profesionales, sin advertir que se estaba entrando en una espiral que hoy día no podemos sostener.
Afortunadamente parece que desde las autonomías se está colaborando con responsabilidad en el control de la deuda, y ello permitirá a la Ministra de Economía adelantar la presentación de la ejecución de las cuentas autonómicas y con ello, intentar frenar ese punto de mira en el que nos colocan las agencias de calificación de la deuda, que ven a España con un recelo que es para echarse a temblar... Y mientras, Zapatero sigue perdido, o escondido, o ausente. El caso es que no aparece y eso colabora más a la falta de confianza. Está visto que haga lo que haga, ya no es creíble y con él al timón, será imposible recuperar esa necesaria confianza.
Ya sé que sonará manido y recurrente, pero la mejor receta que puede aplicarse ahora son unas elecciones anticipadas. Unas elecciones que legitimarían a un nuevo gobierno para aplicar las recetas que pueden hacernos ganar confianza.

miércoles, 15 de diciembre de 2010

La Ley del embudo...

El conflicto de los controladores se ha convertido en una tabla de salvación ante la opinión pública de la autoridad del ejecutivo de Zapatero. Anoche el Consejo de Ministros acordó ampliar el estado de alarma hasta el 15 de enero, medida que con toda seguridad tendrá la aceptación de la población, que lo que quiere es que haya normalidad en los aeropuertos durante las vacaciones navideñas. Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, Zapatero decide no jugársela y mantiene la medida que evita la desgraciada situación del puente de la Constitución.
Estoy absolutamente convencida de que la situación ahora no se parece en nada a la vivida,  porque los controladores son conscientes de que la situación que causaron fue de tal gravedad, que si no negocian será imposible que minoren las sanciones que se van a derivar del paro salvaje. Reproducir un caos aéreo no iba a depararles otra cosa que más daño y más deterioro de imagen.
SLo que ha hecho Zapatero ha sido cubrirse ante la incapacidad de dar una solución al conflicto: para ello se esconde tras una situación excepcional que a los ciudadanos no molesta. Es más, desde que se declaró el estado de alarma, Fomento no se ha sentado a negociar con los controladores, no ha constituido una mesa de negociación para dar salida al conflicto. Esta es la evidencia de la incapacidad para resolver un problema; lo que pasa es que ahora tienen la coartada de la figura de alarma que ya está instalada y que el Gobierno exprimirá al máximo. Zapatero es ya un experto en el ejercicio de hacer de la necesidad virtud, y en este caso que, además, le salgan bien las cosas.
La mejor prueba de que el Gobierno utiliza arteramente este asunto, es que ha marginado al PP a la hora de la toma de decisión. Convoca Zapatero un Consejo de Ministros extraordinario e informa de sus intenciones a CiU y PNV, pero no dice ni una palabra al PP; sin duda con la intención de provocar su disgusto y de que se queden al margen de lo que propone el Gobierno, porque sabe que cuenta con el apoyo de las chantajistas minorías nacionalistas. Así, el PP, si se opone, queda como el partido intolerante, incapaz de respaldar una decisión de Estado y que sólo está interesado en desgastar al Gobierno para provocar su caída. Esta es otra pildorita del eficaz “Comando Rubalcaba” para minar la imagen del PP y para aislarlo del resto de los grupos.
A la hora de escribir estas líneas el PP no ha decidido lo que votará en el Congreso el jueves, pero no se debería dejar amilanar por una cuestion de imagen. Cumplirá con su obligación si es capaz de poner al PSOE y al Gobierno al descubierto, y volver a reclamar explicaciones que hasta ahora no han dado. Debe exigir que se diga qué se ha hecho hasta ahora y exigir que se justifique la necesidad de ampliar la duración del estado de alarma. El PP debe ser contundente, porque es su obligación y porque tiene que pensar que el PSOE sería demoledor si el PP actuara como ahora lo hace él... ¿Alguien se atreve a predecir qué diría el PSOE si un gobierno popular, no sólo adoptara un estado de alarma, sino que lo prorrogara en el tiempo?... Cómo mínimo serían calificados de fascistas próximos al golpismo. Sin embargo, paradojas de nuestra política, el PSOE con esas medidas se presenta como el adalid de la responsabilidad y la eficacia... ¡Increíble!
En febrero comenzó el conflicto de los controladores. El Gobierno asegura que la causa fue el trato favorable que les dio el Aznar. En 8 años han sido incapaces de negociar nada, y en lo que va de año, tampoco lo han hecho. Montaron una estrategia para cercar a unos pocos ricos y no dudaron en utilizar la figura del estado de alarma; ahora lo prolongan con dudosos motivos. La situación actual no tiene nada que ver con lo que pasó en el puente y es seguro que los controladores no se van a movilizar; pero el Gobierno se pone la venda y encubre la incapacidad que tiene para resolver uno de los asuntos más importantes que ahora tiene entre manos... Es lo que hay.

martes, 14 de diciembre de 2010

El país de nunca jamás...

Echo un vistazo a la actualidad de las últimas 24 horas y me encuentro con muchas pruebas de que no sólo estamos en estado de alarma, sino que estamos en un estado de crisis. Nos hemos acostumbrado tanto a vivir en esta situación, que ya apenas la sentimos, pero como dirían en Galicia, “crisis..., haberla hayla".
La fragilidad del Gobierno Zapatero quedó ayer en evidencia con el veto del Senado a los presupuestos del 2011. Es el tercer veto que le cae a los socialistas, con lo que los presupuestos vuelven al Congreso tal y como llegaron a la Cámara Alta. Ha llegado el momento de echar mano del PNV para evitar que los vigentes se prorrogaran  y con ello   camináramos indefectiblemente a las elecciones anticipadas... Nos costará un buen puñado de millones el apoyo nacionalista.
La familia del Cámara de T5, José Couso, acusa al Gobierno de España de conspiración con EE.UU. para enterrar la investigación de su muerte en la guerra de Irak. Es una de las revelaciones de los papeles de Wikileaks, que están dando no pocos quebraderos de cabeza al Gobierno y una separación total del arco de la izquierda.
José Blanco no puede garantizar la normalidad con los controladores tras los 15 días del estado de alarma. No se descarta la prórroga de la situación hasta después de Reyes. Lo va a tener difícil el Gobierno para conseguir un importante apoyo parlamentario, porque faltan muchas explicaciones sobre los motivos por los que aprobó el decreto en un momento tan delicado, como era el comienzo del puente más importante del año.
El PP irá hasta el final en el caso Zarrías. No está dispuesto a pasar por alto que todo un Secretario de Estado se dedique a mentir a la opinión pública, acusando al partido de connivencia con los controladores, una mentira descarada y descubierta que no va a quedar así como así.
José Montilla hace autocrítica por su varapalo electoral, y resulta que carga contra el Gobierno de Zapatero. El Presidente en funciones de la Generalitat, asegura que no han tenido la colaboración del Gobierno Central en asuntos tan importantes como la financiación autonómica. Aquí se ve claramente que se ha tocado arrebato... Sálvese quién pueda.
La venta de viviendas cae casi un 50% en el tercer trimestre del año. Es evidente que hubo un adelanto de compras para evitar la subida del IVA, pero en cuanto se produjo este ajuste, la debacle ha sido constatada. Se espera que puedan aumentar algo las ventas en el último trimestre, para aprovechar las desgravaciones que finalizan el 1 de enero. El caso es que la vivienda no levanta cabeza... Vamos, que no se pone ni un ladrillo.
¡Ah!... Y para que nada falte, el petróleo sigue su escalada de precios y el barril de Brent, que es el que se toma en Europa como referencia, se sitúa en los 91 dólares. Lo curioso es que pagamos la gasolina como cuando valía el citado barril 140$, lo que indica que se mantiene una política de precios ventajosa para las petroleras, porque si la gasolina sigue alta, Hacienda recauda más... Claro, no olvidemos que Hacienda somos todos.
Podría seguir, pero no es necesario. Estas referencias de la actualidad son más que suficientes para demostrar que tenemos un Gobierno a la deriva y que gracias a la sociedad civil este país tira para adelante. Lo que no se puede negar es que los españoles tenemos un gran mérito, porque estas noticias, que son crónica apresurada de las últimas 24 horas, hablan de que al Gobierno casi todo se le escapa de las manos, es incapaz de controlar la situación y de crear un mínimo de confianza para dar seguridad a los ciudadanos y a los mercados. Como no tengamos una campaña de Navidad casi milagrosa y no se tomen medidas para ayudar a las Pymes, la cosa pinta mal, porque se aproxima el comienzo de un nuevo año y espera amenazante y empinadísima la cuesta de enero. Se anuncia que a partir de hoy va a hacer mucho frío... O nos abrigamos nosotros, o si esperamos algo de este Gobierno, nos vamos a quedar helados.

lunes, 13 de diciembre de 2010

Cuando se derrumban los mitos...

Mientras el jueves en el Congreso Zapatero daba explicaciones, a su manera, sobre la crisis de los controladores y eludía responder a preguntas clave, como el momento elegido para aprobar el decreto de la modificación de las horas laborales del colectivo, un grupo de agentes de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil ponía en marcha la Operación Galgo, una actuación en varios puntos del territorio nacional contra el tráfico de drogas dopantes. Algo hacía que ésta fuera una operación especial, porque los agentes entraban en casa de la atleta palentina Marta Domínguez, que tuvo que declarar en el Cuartel de Palencia. Sospechosa coincidencia, una vez más, de la puesta en práctica de una gran operación policial, en un momento en el que el Gobierno pasa por serios aprietos ante la opinión pública. No es descabellado pensar que la mano del todopoderoso Rubalcaba ha vuelto a medir los tiempos y adecuar los éxitos policiales a los momentos difíciles del ejecutivo. El objetivo se había conseguido: Marta Domínguez copaba las primeras páginas de los noticiarios el jueves. Y otra sospechosa coincidencia, la primera información sobre la operación la da El País.com, que también publica las primeras fotos del registro. Este método de trabajo, ya es sobradamente conocido.
Sorpresa y conmoción por la presunta implicación una de las atletas más valoradas del deporte español de todos los tiempos y presunción absoluta de inocencia para ella, cuestión que es menos obvia de lo que parece, porque si los nombres salen a la luz es casi como una condena pública. Marta goza en este momento de la presunción de inocencia y declarará esta semana ante el juez. Pero tampoco podemos obviar que cuando se pone en marcha una operación de tal calado, es que existen indicios muy evidentes, porque los jueces en caso contrario no darían las autorizaciones pertinentes.
No voy a hacer juicios de valor, porque insisto que prima la presunción de inocencia, pero sí me gustaría reflexionar sobre el daño que comportamientos como los que se denuncian, causan en la sociedad. Que personas que tienen un nombre, que son una referencia para los ciudadanos, se vean inmersos en sucias tramas perseguidas por la ley, constituyen un jarro de agua fría para una sociedad que desgraciadamente no está sobrada de valores. El esfuerzo, la vocación de sacrificio, la sana competitividad a la que invita el mundo del deporte, las gestas de nuestros míticos nombres de la élite deportiva, son el mejor ejemplo para una juventud demasiado acomodada, que no ha tenido grandes problemas, pero que se enfrenta ahora a una de las etapas más duras de su vida. Hoy, los jóvenes se enfrentan a una sociedad más desnaturalizada, una sociedad que vive a velocidad de vértigo y donde prima el éxito, el dinero, el llegar a costa de lo que sea... El ejemplo de los ídolos es el de la lucha y el sacrificio para llegar a la meta, el del trabajo continuado, renunciando a muchas cosas. Que todo ello se venga abajo porque en el fondo lo que había era precisamente el enriquecimiento, el interés personal y el olvido del grave daño que se causa a la sociedad, no sólo es lamentable, sino que es una invitación al escepticismo y a creer que hay pocas cosas limpias.
Debemos luchar contra ello con uñas y dientes, y contextualizar los hechos que son personales y no colectivos. Ayer en Portugal nuestros atletas hicieron un magnífico papel en el Cross de Albufeira, con tres medallas individuales y tres por equipos. Una demostración evidente que se trabaja y que se hace bien y que ésta es la regla general... Decepciones como la de la semana pasada son las menos, pero son tan convulsas...

viernes, 10 de diciembre de 2010

Algo más que un cónclave político.

Todas las encuestas vaticinan que si en este momento se celebraran elecciones generales, la victoria del PP sería tan clara, que no habría dudas de que los ciudadanos estaban dando una cierta libertad de acción al partido para acometer las necesarias reformas para intentar salir de la crisis. Dicho en román paladino, la percepción de los españoles es de un clamoroso fracaso de las políticas de Zapatero, que nos han puesto al borde del abismo, y los tan traídos y llevados brotes verdes sólo son una alucinación en la mente de unos cada vez más incapaces dirigentes socialistas.
En Segovia hoy se clausura la reunión de presidentes provinciales e insulares del PP. Se trata de una reunión preparatoria de las próximas elecciones municipales y autonómicas, uno de los encuentros de mayor calado político en la organización, porque se trata de sentar las bases de lo que será la propuesta que el partido lanzará para los ayuntamientos y las comunidades autónomas. Saben los populares que sólo una victoria en estos comicios, asentará una futura victoria en las generales del 2012, ya que la conquista del poder central comienza en el poder local y autonómico.
Sin embargo, hay algo más en el momento político actual que hace que este encuentro sea distinto a cualquiera de los celebrados hasta ahora. No se trata sólo de ofertar una propuesta para ciudades o pueblos, se trata de hacerlo con un problema de financiación municipal tan grave, que a muchos ayuntamientos les es imposible asegurar en este momento el futuro de algunos servicios ciudadanos. El Gobierno Zapatero ha sido incapaz de afrontar un modelo estable y solvente de financiación municipal, y con la medida anticrisis de impedir la petición de créditos, ahoga irremediablemente a numerosos consistorios. Todos sabemos que son necesarias medidas anticrisis y que hemos vivido por encima de nuestras posibilidades, pero no se pueden adoptar medidas a tontas y a locas, sin haber analizado previamente las consecuencias. Por eso es el momento de realizar un trabajo serio y riguroso, que permita a los ciudadanos confiar. No basta con ganar porque el adversario es rechazado, hay que ganar por propios méritos, por ser capaces de mostrarse cerca de la sociedad, por tener capacidad para escuchar, por saber comprender los problemas que interesan a las personas, que en no pocas ocasiones están bastante alejados de las guerras internas o entre los partidos, o de la endogámica relación entre políticos y periodistas.
Si hablamos de política general, llegar a final de mes y tener las necesidades cubiertas son preocupaciones esenciales de los españoles; si nos referimos a las administraciones más cercanas, preocupan los servicios ciudadanos, aquellos que generan calidad de vida y hacen más confortable la convivencia. Sanidad, educación, servicios sociales, son prioritarios y deben formar parte de una propuesta que debe ser necesariamente imaginativa y audaz, porque es la hora de los políticos, de los líderes capaces de arrastrar a la sociedad. 
El PP ha de ser consciente de la responsabilidad que tiene en numerosos frentes ante las próximas convocatorias electorales, porque no es suficiente con ganar los comicios. Se trata de convencer, de ser capaces de inculcar a la sociedad valores que suplan la desconfianza y el hastío que se detecta en este momento. Se trata de luchar por  recuperar la credibilidad de y en la política, que es algo fundamental para que los proyectos tengan éxito. Se trata, en resumen, de hacer un esfuerzo por demostrar a la sociedad que en la política hay que tener vocación de servicio, vocación por hacer cosas por el bien común, por anteponer los intereses de lo colectivo sobre lo personal. 
Las crisis son tiempos de oportunidades, y ya que Zapatero es incapaz de asumir su responsabilidad y convocar unas elecciones que darían la capacidad a un nuevo Gobierno para tomar las medidas necesarias, que todos sabemos que serán duras, el PP ha de ser capaz de representar lo contrario: la responsabilidad de ofrecer al país la alternativa que necesita. De todo esto se habla estos días en Segovia, en un encuentro que demuestra la implantación del partido en toda España y la capacidad de llegar con su mensaje a cada rincón del país.

jueves, 9 de diciembre de 2010

Para resolver un problema, no se genera otro mayor.

Cuando Zapatero suba hoy a la tribuna del Congreso de los Diputados para dar cuenta de las medidas adoptadas para paliar el caos producido por la huelga salvaje de los controladores el pasado viernes, deberá tener la prudencia de no caer en el triunfalismo de colgarse medallas por haber resuelto un conflicto. Debería limitarse a emplear la prudencia del buen gobernante y limitarse a dar cuenta de las medidas adoptadas para reponer el orden y dibujar la hoja de ruta para que este tipo de situaciones no vuelvan a producirse.
Una máxima del buen gestor es que la resolución de un conflicto, no genere otro mayor. Y el Gobierno Zapatero, que no es un  buen gestor, quiso resolver el conflicto con los controladores “por sus reales”, y lo que originó fue un incendio de proporciones inimaginables. El Gobierno podría tener todas las razones del mundo para imponer un decreto que acabara con los supuestos privilegios de este colectivo, pero podría haberlo hecho una semana antes, o una semana después, y no esperar a que el calendario señalara el gran puente de diciembre, porque el resultado ha sido dramático.
Ha sido un Gobierno socialista quien ha metido las tanquetas en Barajas o en el Prat y ha colocado a los militares en las torres de control de los aeropuertos. Ha sido un Gobierno socialista quien ha decretado el primer estado de alarma del país en la democracia. No quiero ni pensar la que hubiera armado ese mismo PSOE, si estas decisiones las hubiera tomado un gobierno del Partido Popular. Ya tendríamos tema para las campañas electorales de los próximos 50 años...
Es asombroso que en una situación como esta, el Presidente de todos los españoles haya sido incapaz de dar la cara para explicar cómo se estaba resolviendo la crisis de los aeropuertos, con más de 350.000 ciudadanos atrapados por la situación. Ni una palabra, ni una sola aparición pública, sólo unas tímidas declaraciones el día de la Constitución y las explicaciones que hoy escucharemos en el Congreso. No sólo no explica el Presidente las cosas, sino que mandan al Secretario de Estado de Cooperación Territorial, Gaspar Zarrías, a mentir con un desparpajo pocas veces conocidos, al afirmar públicamente que el PP se reunió con los controladores antes de la crisis, cuando en la reunión estuvieron todos los grupos parlamentarios a excepción del socialista. Este es el mismo Gaspar Zarrias que se dedicaba en el parlamento andaluz a votar con los pies y con las manos, hay testimonio gráfico, en una muestra evidente del desprecio que tiene por los sistemas democráticos... Hace bien el PP en pedir la reprobación del personaje, que es una vergüenza para la política española. Ya lo dijo Rubalcaba: “España no se merece un Gobierno que miente”. Pero esa receta para el PSOE no vale.
Y qué decir de José Bono, el Presidente del Congreso, que no se corta en decir públicamente que el PSOE debe pagarle unas vacaciones a Rajoy, porque el líder del PP es un chollo para los socialistas. La declaración la hace en público, para después decir que pide disculpas en privado. La vieja estrategia del “calumnia que algo queda”, porque Rajoy se quedó colgado en Lanzarote y los socialistas deslizaron, por si colaba, que estaba de vacaciones mientras se producía el grave conflicto.
Zapatero contará con el apoyo del PP en la declaración del Estado de Alarma. No habrá fisuras, pero el PP cumplirá con su obligación si exige las responsabilidades políticas que hay que sustanciar. ¿Qué ha pasado desde febrero en las negociaciones con los controladores?... ¿Por qué si las negociaciones estaban rotas no se ha nombrado un mediador?... ¿Por qué el Gobierno aprueba el viernes el decreto cuando tenía antecedentes de las medidas que iban a tomar los controladores, que ya las habían mostrado en Lavacolla?... Son algunas de las preguntas a las que Zapatero tiene que dar hoy respuestas. No vale jugar con la mala imagen de un colectivo que gana mucho dinero, para hacer lo que se quiera y mostrar medidas de fuerza de consecuencias graves. Por supuesto que no se debe consentir que se echen pulsos al estado de derecho y que el es el Gobierno a quien corresponde Gobernar. Pero no se puede gobernar a golpe de improvisación, por impulsos, por demostrar quién tiene la fuerza. Se gobierna para resolver problemas, y éste de los controladores ha tenido 10 meses para encontrar una solución. 

sábado, 4 de diciembre de 2010

Entre la imprevisión y el caos... la imaginación.

En algún momento de la semana que acaba se me pasó por la cabeza coger un billete para volar a Barcelona. Finalmente se impuso la idea de quedarme por aquí estos días. Y acerté de pleno, porque a estas horas supongo que estaría escribiendo estas líneas, no en la comodidad del sofá, sino en cualquier esquina de un aeropuerto, con un disgusto supino y casi sin el derecho al pataleo.
No hay derecho a que 250.000 personas (es la cifra que se da cuando escribo este post), se hayan quedado colgadas este puente, por la actitud cerril de un grupo de privilegiados que se resisten a apretarse el cinturón en el momento actual. Dicho esto, que es una verdad como un templo, también hay que decir que me parece mentira que todo esto venga de un conflicto que se extiende desde el pasado mes de febrero, sin que el Ministerio de Fomento haya logrado una solución. Más kafkiano aún me parece que, sabiendo cómo se las gastan los controladores, el Gobierno apruebe el mismo día que comienza el puente, un decreto que modifica sus horas presenciales en el puesto de trabajo, la espoleta que ha puesto en marcha una de las mayores crisis públicas que registradas en los últimos años. Sí será grave el asunto, que se ha militarizado a los controladores civiles, que los militares han tomado las torres de control o que la Guardia Civil ha entrado en el hotel donde se reúnen los controladores para comunicarles su nueva situación.
Estamos ante una situación intolerable en la que hay que reconocer que el Gobierno, por primera vez en muchos años, toma decisiones fulminantes y comprometidas, asumiendo su responsabilidad de intentar devolver la situación a la normalidad. Nada de esto debería haber sucedido, porque han pasado muchos meses desde que José Blanco anunció que se acabarían las situaciones de privilegio que este colectivo mantenía y hemos asistido a unas situaciones rocambolescas de aducir un exceso de estrés, para no acudir a sus puestos de trabajo, lo que demostraba hasta qué punto podían llegar los controladores en la defensa de esos privilegios.
El Gobierno usó la imagen de ajustar a trabajadores que ganaban sueldos con muchos ceros, lo que era bien recibido por un país que veía disparar el paro; pero luego dejó el asunto en "stanby", hasta que este mediodía decidió reactivarlo.
Hay colectivos que deben tener claro que su tarea es tan importante, que no admite situaciones salvajes que colapsen la vida ciudadana. El colectivo sanitario, los bomberos o los controladores aéreos están entre ellos. Además de su condición de trabajadores, son servidores públicos, personas que por formación tienen que ejercer su tarea hacia los demás, lo que implica una responsabilidad que aquí no han sabido ejercer.
Es de desear que todo lo vivido prevenga situaciones futuras y que se tome buena nota de que la previsión, es la mejor aliada para evitar conflictos. Lo saben mejor que nadie los afectados, que no son los culpables, pero sí los sufridores a los que nadie devolverá el ocio perdido.
Contra el mal humor, el enfado o el estrés de estas situaciones, lo mejor es pensar que hay todavía cinco días por delante para intentar disfrutarlos. Puede que no en el destino inicialmente previsto, pero España da para mucho y seguro que la voluntad juega un papel esencial. Desde este modesto post, rompo una lanza por ver la botella medio llena, por haber tomado nota de lo que nunca debió ser y por el arranque de unos días en los que la imaginación se convierta en el gran destino, y la amistad, en la gran aliada para pasar estos días de puente, que sólo nosotros podemos hacer que sean inolvidables. Todo es poner de nuestra parte. De corazón, os deseo un maravilloso puente para todos. 

viernes, 3 de diciembre de 2010

"Año de nieves, año de bienes"....¡Ojalá!

Hay 240.000 parados más que en noviembre del año pasado. El dato es contundente y demuestra que las reformas de Zapatero han sido insuficientes y particularmente, la reforma laboral, ha sido poco útil para contener la gran sangría actual de nuestro país.
Que el incremento mensual del paro haya sido sólo del 0,6%, no da derecho a los políticos socialistas a hablar de cierto optimismo, porque tal y como estamos, un sólo parado más es un fracaso de la política del Gobierno.
Lo curioso es que a menos de 24 horas de aprobar un nuevo paquete de medidas anticrisis, de que el Presidente del Gobierno anulara por primera vez su presencia en Cumbre Iberoamericana y de que se haya registrado un nuevo aumento del paro, Zapatero conceda una entrevista a la cadena americana CNBC, una de las principales dedicadas al mundo económico, para vender una España saliendo de la crisis que, desgraciadamente, se aleja bastante de la realidad.
Es trabajo del Presidente dar la mejor imagen del país, pero para ello debería tener dos cualidades: credibilidad y confianza. Y ni lo uno, ni lo otro... La credibilidad de Zapatero no existe ni en el seno del propio PSOE y prueba de ello es el movimiento subterráneo en la organización, que se muestra seriamente preocupado por el horizonte electoral socialista, ya que cada vez son más los convencidos de que el 22 de mayo Zapatero recibirá una gran patada en sus respectivos culos... Y si la credibilidad aquí es inexistente, qué decir de lo que se piensa en el mundo desarrollado, que tuvo que obligarle a tomar medidas porque llevaba al país y al euro al caos más absoluto...
De la confianza hay muy poco que decir, porque en gran medida la crisis que atraviesa España es de confianza; confianza en los mercados y confianza en los gobernantes. ¿Cómo se puede tener confianza en quien negó la crisis sistemáticamente, en quien anunció brotes verdes que nunca existieron, en quien negó medidas que después tuvo que acatar por imposición?... ¿Cómo se puede confiar en quién llamó antipatriota y antisocial a la oposición política por proponer medidas que luego él ha tenido que adoptar?... No, confianza no es precisamente lo que suscita Zapatero, por mucho que solemnemente proclame en la CNBC que España es solvente, que no será intervenida o que será el país de la UE que más crecerá en 2012. ¡Ojalá tenga razón y tengamos que desdecirnos de todas estas consideraciones! Pero no nos engañemos, la confianza sólo llegará de la mano de la salida de Zapatero de la Moncloa y de la formación de un Gobierno solvente, dispuesto a tomar medidas y a jugársela para ajustar al país y disminuir drásticamente la deuda pública, generada por un despilfarro que no ha tenido precedentes en la etapa democrática. La situación en España es tal, que en los próximos presupuestos tendremos que pagar 80.000 millones de euros, el 8% del PIB, en el desempleo y en el pago de los intereses de la deuda. Este es el legado de Zapatero y la prueba incontestable de su falta de credibilidad y de confianza.
Las elecciones catalanas han demostrado que los ciudadanos confían en las recetas de centro derecha para salir de la crisis y eso sí que es algo extrapolable al ámbito nacional. El PP representa ese espectro y debe ser consciente de que debe tener a punto soluciones que, si llega al Gobierno, tendrá que poner en práctica sin demora. Pero mientras tanto, tiene la responsabilidad de arrimar el hombro y de trabajar para intentar salir cuanto antes de esta situación.
Nevó ayer bastante en Valladolid y lo lleva haciendo en toda la mitad norte de España. Ojalá pueda aplicarse aquello de “año de nieves, año de bienes”, y que eso significase que el 2011 sería un buen año... Tal vez la mejor noticia para todos fuera el adelanto de las elecciones y el cambio de rumbo político. Lo necesitamos de verdad.

jueves, 2 de diciembre de 2010

Por fin salió el conejo de la chistera.

Hay que reconocer que las medidas anunciadas ayer por Zapatero para luchar contra la crisis van en la buena dirección. Pero no nos engañemos, no hay un "plan" contra la crisis; es un conjunto de medidas, muchas de ellas aisladas e inconexas, que lo que hacen es lanzar a la población el mensaje de que algo se está haciendo. Si además lo unimos al golpe de efecto de suspender sus viajes a Bolivia y Argentina y que con esa decisión es la primera vez que España no asiste a la Cumbre Iberoamericana, cerramos el círculo de una nueva operación de imagen, aunque esta vez aporta algo positivo.
Zapatero avanza sus 9 medidas y la bolsa sube. Más que subir, se dispara casi un 4,5%, aunque no tengo claro que exista una relación directa tan clara. Más bien es el resultado del rebote de una caída en noviembre del 14%, y consecuencia de las medidas del Banco Central Europeo, que compró un importante paquete de deuda periférica. Posiblemente la sesión de hoy volverá a la senda negativa de los últimos meses, porque los mercados están locos y la estabilidad es más volátil que el dinero en el parqué.
Por fin Zapatero se ha dado cuenta de que hay que favorecer a las pymes, y para ello asume medidas que el PP llevó varias veces al Congreso y que sistemáticamente rechazó la mayoría socialista... Rectificar es de sabios y si es para bien, es algo saludable para la habitual soberbia de algunos políticos. El PP las ha valorado, como no podía ser de otra forma, de manera positiva, aunque advierte, y tiene toda la razón, que son medidas insuficientes porque lo que España necesita de verdad es un plan global de reformas estructurales.
Y aparecen de nuevo los sindicatos, que con ese afán de colaboración que siempre practican, han criticado duramente las medidas que benefician a las empresas... ¿Pero es que son incapaces de entender que si las empresas no funcionan no se pueden crear puestos de trabajo?... ¿Es que no se dan cuenta de que lo que ahora se debe priorizar es la creación de empleo y este lo generan las empresas?... Empiezan a anunciar un invierno caliente y estas medidas, unido a la de suprimir en febrero la ayuda de 426€ a los parados de larga duración, aventura una ruptura definitiva con el gobierno y un casi imposible diálogo social. Y todo sin que se haya abordado la financiación sindical, una medida que tarde o temprano el Gobierno deberá tomar.
Habrá que esperar al viernes para conocer los detalles del "conejo" que saca de la chistera Zapatero. En él va también privatizar parcialmente la gestión de los aeropuertos, un guiño a CiU que lo lleva pidiendo años, pero que hoy tiene un futuro incierto ya que no sobra el dinero para invertir y menos cuando las empresas no tendrán el control de la gestión. Se espera recaudar con esta medida 10.000 millones de euros, una cantidad que está por ver que se consiga.
Lo dicho, parece que ahora sí hay medidas en buena dirección y si se va más a fondo y se acomete un plan integral de reformas estructurales, el PP compromete su apoyo. Pero lo que no parece muy probable es que el PSOE asuma el riesgo de la impopularidad que generarían. España tiene que ganar confianza y a las alturas en las que estamos, esa confianza sólo vendría de un gobierno que afrontara con valentía las reformas necesarias. Eso se traduce en elecciones anticipadas... Si Zapatero, que no lo hará, decidiera adelantar las elecciones a febrero, daría un balón de oxígeno a numerosos alcaldes y a "barones" regionales, que temen pagar los vidrios rotos de su desastrosa gestión. Pero claro, eso significaría generosidad para con España y con el PSOE, y esa es una cualidad que no tiene Zapatero. Lo suyo es agarrarse al clavo ardiendo que le ha brindado el PNV y de esa forma aguantar a costa de lo que sea... Las alarmas siguen encendidas en el PSOE y no parece que el Presidente esté dispuesto a apagarlas.

miércoles, 1 de diciembre de 2010

De la C.I.A, a la T.I.A.

Anda revuelto el cotarro de la diplomacia internacional por la masiva filtración de documentos en Wikileaks; una web de máxima actualidad, en la que se cuelgan documentos filtrados a la organización que la gestiona y que asegura que su objetivo es dar a conocer documentos que los países consideran secretos. El primer golpe de efecto de la web, http://cablegate.wikileaks.org/articles/2010/Wikileaks-empieza-a-publicar.html,  fue la publicación de documentos de la guerra de Irak y de Afganistán, lo que puso los pelos de punta y en pié de guerra a las autoridades de EE.UU, que veían al descubierto sus documentos más secretos y también sus vergüenzas.
Son ahora nada menos que 250.000 documentos que han sido filtrados esta semana y que tocan a las relaciones internacionales de EE.UU... Que las embajadas americanas, como las de cualquier país, son máquinas de recoger información de donde trabajan, era un secreto a voces que ahora está contrastado con los documentos al descubierto. Que cada país va a lo suyo y que las opiniones que se vierten son, cuando menos, curiosas y despectivas, es algo que se suponía, pero que ahora es evidente. Es de esperar que el resultado final no sea un enfrentamiento diplomático masivo, que sería el fruto de una torpeza clamorosa a la hora de custodiar la información.
Que la embajada americana cuente que Zapatero llegó al poder por la mala gestión que el PP hizo del 11M, no aporta nada nuevo. Tampoco que se diga que el Rey tiene más prestigio que el Gobierno, o que Zapatero es un izquierdista trasnochado y cortoplacista. Si para hacer informes de tanta profundidad es para lo que sirven los servicios diplomáticos americanos, lo que produce no es temor, sino vergüenza; porque en lo que se refiere a España, son una colección de obviedades que sólo pueden inquietar por la incapacidad que han tenido para custodiar documentos que nunca debieron ver la luz.
Otra cosa es lo que pasa con las zonas calientes de planeta, como el Golfo, la carrera nuclear o las relaciones con Rusia. Aquí si que hay opiniones comprometidas y revelaciones que pueden poner las cosas muy difíciles, cara a la distensión o la progresiva desnuclearización de países que se han lanzado a por el armamento nuclear.
Hillary Clinton ha puesto el grito en el cielo y dice que se trata de un ataque a la Comunidad Internacional. No, de lo que se trata es de un fracaso absoluto del Departamento de Estado americano, que es incapaz de custodiar informes que seguro que son necesarios, pero que por el carácter interno y por la seguridad que comprometen sus contenidos, deberían ser salvaguardados de la opinión pública.
No hay que equivocarse y culpar de todo al mensajero. No es culpable quien los divulga, puesto que su contenido es de indudable interés mundial, es culpable quien es incapaz de guardarlos y quien tiene acceso a ellos y los filtra con una evidente irresponsabilidad, o una evidente intencionalidad. Estados Unidos presume de ser la primera potencia del mundo, pero también muestra agujeros que le cuestionan y le pone en el más absoluto de los ridículos. Los sofisticados sistemas de seguridad son tan vulnerables, que parecen más propios de los agentes de la T.I.A, nuestros Mortadelo y Filemón. Claro que con ellos nos reíamos y hemos pasado muy buenos ratos, mientras que con lo que estamos viviendo, las risas son las menos y los ratos, de buenos no tienen nada...
Lo que es evidente es que las nuevas tecnologías son esenciales para el desarrollo de los pueblos y para la comunicación, pero pueden convertirse en un juguete diabólico que globaliza todo y que escapa a cualquier intento de atadura. Ello impone a los Gobiernos ser más cautos, trabajar con más profesionalidad y seleccionar muy bien, mucho mejor de lo que se hace, a los leales, porque sólo en la lealtad está la verdadera seguridad. Y ésta, es una norma vigente para cualquier faceta de la vida que nos convendría recordar más a menudo.

martes, 30 de noviembre de 2010

"El silencio de los corderos..."

En el momento en que escribo, han pasado ya más de 24 horas de las elecciones catalanas y Zapatero no ha dicho ni pío sobre los resultados del domingo. Ni una sola palabra. A esta hora comparte cena con Gadafi, en esa patológica costumbre de estar siempre donde están los políticos más bananeros del mundo.
El desastre del PSC, que consiguió peores resultados que en las generales, denota que no sólo sufre desgaste por el tripartido, sino que traduce un duro castigo a las políticas socialistas, que son incapaces de crear el ambiente de confianza que el país necesita para salir de la crisis. Por primera vez en muchos años, se produce un trasvase, difícil de cuantificar, del voto nacional del socialismo catalán hacia el PP, porque es su único refugio y porque el mensaje de que los ciudadanos confían en el centro derecha, ha sido uno de los mensajes más evidentes de las elecciones del domingo.
En dos tiempos, se va Montilla. El domingo anunció que no se presentaría más a la secretaría del PSC y ayer anunció que no ocupará el escaño de oposición al que le han relegado los electores. ¿Pero se va Montilla o le obligan a irse?... Sinceramente creo que es lo segundo. Montilla asume así toda la responsabilidad de la derrota y se autoinmola para evitar que se extrapolen los resultados y se culpe a Zapatero del desastre.
Sinceramente, me parece de una desvergüenza que asusta, un fraude a los electores que le han votado. Lo decente es que un candidato asuma el papel que le reserva la soberanía popular. A veces da la impresión de que hay políticos que son incapaces de asumir, que la política se ejerce también sin el coche oficial y sin la corte que tradicionalmente rodea al poder. La grandeza personal y política se demuestra en la adversidad de la derrota; por el contrario, la generosidad se muestra en la victoria. Por desgracia hoy no hay mucho ni de lo uno y ni de lo otro... Se abre ahora un tiempo para el debate o para la catarsis en el PSC.
El ramo de rosas que Rajoy regaló a Alicia Sánchez Camacho en la ejecutiva del PP ante los presidentes regionales del partido, fue una forma de agradecer un trabajo intenso, que ha obtenido el merecido reconocimiento. El PP logra el mayor número de escaños de su historia en Cataluña y lo que es más importante, logra un importante avance que hace presagiar viento de cambio en España. De siempre, cuando el PP avanza en Cataluña, hay un factor multiplicador en el resto de España y sólo si se produce ese avance, se puede consolidar la victoria en el territorio nacional. Pero no olvidemos que es verdad que se logra el mejor resultado en escaños, pero 0,7% menos que Vidal Quadras en 1995 y ahora el deterioro socialista es mayor, lo que obligará no sólo a no bajar la guardia, sino a trabajar muy a fondo.
Y un dato a tener en cuenta. Si sumamos los votos del PP y Ciudadanos, voto claramente nacional, están muy cerca del PSC. Si hubiera funcionado el voto útil con el PP, este partido hubiera podido ser la segunda fuerza política de Cataluña, lo que ha ser una referencia para el futuro.
No hablaré del grupo de frikis que han entrado en el Parlament, porque me niego a hacer el juego a quienes siguen a un nefasto personaje que se sirvió de la buena imagen del Barça, mucho más que un club de fútbol en España y en el mundo, para enriquecerse y para proclamar ahora el independentismo. Ni representan a Cataluña ni a los catalanes, sólo se representan a sí mismos y a sus intereses. Me alegra que CiU anuncie que va a gobernar desde la moderación, porque ése es el mandato que le ha dado la sociedad catalana. No debe olvidar que los ciudadanos han apostado por políticas de centro derecha, y que lo que le han encomendado es la tarea de devolver a Cataluña la pujanza que tuvo y el papel que le corresponde. Sin embargo, me preocupa la imagen de Artur Mas en los periódicos, saludando desde el balcón con la mano extendida y el pulgar replegado, signo inequívoco de la independencia catalana... No es la prioridad ahora y espero que Mas entienda el mensaje.
Cataluña se ha pronunciado y Zapatero se ha quedado mudo... Noqueado o escondido, su actitud pone de manifiesto que le guste o no, estas elecciones han “tocado” seriamente al PSOE. Al Presidente, lo único que le habrá agradado de Cataluña en las últimas horas, es la victoria del Barça sobre el Madrid, 5-0, lo que no deja lugar a duda de quién dominó el partido... Él ya no domina nada.

lunes, 29 de noviembre de 2010

"Con 8 basta..."

No hubo sorpresas. La victoria de CiU ha sido inapelable y ahora asume la responsabilidad de formar gobierno en Cataluña. Su resultado (62 escaños) le permite manos libres para gobernar sin apoyos fijos. Sin embargo, sí ha habido novedades... El PP (18 escaños), mejora sus previsiones más optimistas, con los mejores resultados de su historia lo que consolida al partido como la tercera fuerza política. El PSC se hunde por debajo de los 30 escaños (logra 28) y ERC se queda en 10. Sorprende, y de qué forma, el resultado del partido de Laporta, que logra 4 escaños y que genera la peor noticia de la noche; porque se pueden defender unas u otras ideas, pero lo que es intolerable es hacer el ridículo y adoptar posiciones frikis para aglutinar un voto descontento y marginal... Lamentable y muy dañino para la política.
Las elecciones de ayer mejoraron las previsiones de participación, llegando casi al 60%. Se confirma que pese a la mala campaña de algunos partidos, los ciudadanos han asumido la responsabilidad de acudir a las urnas y de elegir a sus representantes, máxime en un momento tan difícil y tan duro como el que estamos atravesando en España.
No es cierto que los ciudadanos estén desmovilizados y “pasen” de la política. Son conscientes del momento y de la importancia del voto y eso se ha puesto de manifiesto en una jornada ejemplar; marcada por la normalidad y también por la incertidumbre del significado de unos comicios que abren un tiempo nuevo en Cataluña, que deja claro que no es posible reeditar un nefasto gobierno tripartito que ha sido “machacado” literalmente en las urnas.
La gran pregunta en este momento sería la de en qué forma estos resultados se pueden aplicar a la vida nacional. Cataluña tiene peculiaridades que hacen que se circunscriba casi todo a su territorio; pero no es menos cierto que hay datos que revelan que el PSC ha sido castigado no sólo por su papel en el tripartito, sino por el desastre de la gestión del Gobierno de Zapatero. La insistencia anoche de los socialistas en no hacer lecturas nacionales de los resultados, evidencian el miedo real que tienen a la mala imagen nacional del partido. Montilla es ya historia y el rostro de Corbacho deja claro el desastre cosechado.
Para el PP la lectura es muy positiva, porque no va a ser fácil aislarlo, e incluso puede asumir un papel muy importante en algunas decisiones del nuevo gobierno. El partido no debe morir de éxito y entender que este es un paso más en su proyecto político, y que sólo cuando se está cerca de los problemas de los ciudadanos, estos les perciben como una opción a respaldar. El PP logra sus mejores resultados con todo en contra, lo que consolida a Alicia Sánchez Camacho como una político a tener muy en cuenta.
Y gana CiU, que consigue que Cataluña sea más gobernable. Pero no nos engañemos, Cataluña alcanza, ¡y de qué forma! su mayor nivel nacionalista, porque CiU concentra todo el voto útil que se llevó en su día el tripartito. Sólo cabe esperar que Mas tenga la responsabilidad de unir y no de romper; algo que veremos enseguida, cuando comprobemos a quién se arrima cuando necesite los primeros apoyos... No es el mejor presagio que en su discurso de anoche no hubiera ni una sola referencia a España.
Estas elecciones han dejado claro que los ciudadanos quieren estabilidad para resolver sus problemas y que no quieren más experimentos inútiles. Han dicho que asuntos como el Estatut se la traen "al pairo" y para ello sólo hay que comparar los datos de participación en el referéndum y ayer en las elecciones... El nuevo parlamento tendrá que trabajar duro y hacer un esfuerzo por el entendimiento... Y el PP se articula como una opción a tener en cuenta para moderar el avance nacionalista, por lo que su papel de partido nacional estará ahora más vigente que nunca.

viernes, 26 de noviembre de 2010

"Les 12 van tocant..."

Faltan sólo unas horas, para que concluya la campaña electoral catalana. El domingo, a votar. Desde el primer momento se sabía que estas elecciones iban a marcar la pauta de la vida política en los próximos meses, pero lo que no imaginamos es que podían obligar a una revisión a fondo de lo que deben ser las campañas electorales.
Las elecciones marcarán la pauta porque es imposible que de ellas no se haga una extrapolación política, sobre todo de los resultados del PSC, que para muchos analistas serán el termómetro de la percepción de los votantes sobre el momento actual del PSOE. Se mirarán con lupa los datos del “cinturón rojo” de Barcelona, bastión clave en todas las victorias socialistas.
Aunque en menor medida, también las elecciones serán un termómetro para el PP. El hecho de que, casi con total seguridad, recuperen el puesto de tercera fuerza política, ya es un respiro; pero la clave es saber si habrá incremento de votos y escaños y, si los escaños populares podrán ser el puntal que dé estabilidad al Gobierno seguro de CiU, que no parece que vaya a conseguir la mayoría absoluta. Lo demás está cantado: debacle de ERC, bajada de IU, mantenimiento de Ciudadanos y reparto de votos sin escaño para el espectro friki de la política.
Decía que no se suponía que fuera a obligar a revisar las campañas electorales, pero lo ha hecho, porque hemos asistido en estos 15 días a lamentables espectáculos para olvidar. Todo ha sido un cúmulo de despropósitos, desde la actriz porno pidiendo el voto para un cara dura, a una Monserrat Nebrera que no se sabe muy bien qué es lo que entiende por inteligencia política o al desatino y la chapuza de algunos jóvenes cachorros de partidos... Claro que los activistas de Mas han pasado de la nada al todo, de la campaña plana al estímulo de los nacionalistas radicales. Ahí está para la antología del despropósito su declaración sobre que se va a acabar que Cataluña pague la “fiesta” de España. No hay que entrar en una provocación sin sentido, porque ya está bien de enfrentar a los territorios y hacer de todo un agravio comparativo. Cataluña aporta a España, porque puede hacerlo, porque tiene más población, más puestos de trabajo, una lengua, etc...; y España aporta a Cataluña, porque favorece su desarrollo y la considera un territorio estratégico para la fortaleza del país.
En resumen, una campaña para olvidar, a la que se ha sumado como guinda la Junta Electoral, prohibiendo un cara a cara porque no se solicitó a tiempo. Vivimos en un país que a este paso controlará hasta el momento en que tenemos que comer. No sé muy bien qué entendemos por libertad de expresión. No se puede debatir entre las dos principales fuerzas políticas porque se vulnera la imparcialidad... No se ha visto patochada semejante en una sociedad moderna. Admitamos (igual que lo hacemos en lo de “pulpo como animal de compañía”), que no se pueda debatir en las televisiones públicas. Pero, ¿y en las privadas ¿Por qué no se puede debatir en las privadas ¿Por qué no se ha solicitado con 5 días de anticipación?. ¿Me puede explicar alguien por qué hay que pedir oficialmente un debate?... En una sociedad moderna o avanzada, se ponen de acuerdo las dos partes y punto pelota. Aquí no. Aquí hay que autorizarlo todo. No se puede debatir, pero se puede emitir un video donde una joven sufre un orgasmo por votar a Montilla.
El domingo se vota. La previsión, que ojalá no se cumpla, es la de una baja participación. La campaña, desde luego, no ha contribuido a aumentarla. Esperemos que el resultado sea el que necesita Cataluña y abra un tiempo nuevo que refuerce a una sociedad clave en el protagonismo de este país... Yo lo tengo muy claro: una Cataluña fuerte es lo que necesita España y corresponde a los partidos que el domingo se someten a las urnas, propiciarlo... Ojalá sean responsables con los ciudadanos y con la historia.

jueves, 25 de noviembre de 2010

Otra foto como bombona de oxígeno.

Es una buena idea, pero llega tarde. Reunir a los 30 empresarios más importantes del país para hablar de la crisis, es algo que debería haberse hecho hace mucho tiempo, aunque también podría aplicarse aquel “más vale tarde que nunca”... Lo cierto es que hay muchos “peros” que poner a esta reunión.
Zapatero, ahogado hasta el cuello por unos indicadores económicos que dejan muy claro la falta de confianza que existe en él y en el país, mueve ficha para intentar tomar oxígeno y tratar de ganar tiempo para que escampe la gran tormenta internacional, donde Irlanda, Portugal, la progresiva debilidad del euro y otros tantos elementos, se conjuran para agudizar la ya de por sí profunda crisis instalada en España. Pero mucho me temo que estamos ante una nueva operación de imagen a la desesperada, porque Moncloa advierte que la reunión de Zapatero con los 30 empresarios el próximo sábado, es una sesión para escuchar a las empresas, conocer sus problemas y analizar en qué forma se les puede ayudar. Todo ello en 3 horas, lo que supone que cada empresario tendrá seis minutos para exponer su punto de vista y para debatir, un tiempo que me parece claramente insuficiente para abordar el tema de que se trata.
Es otra operación de imagen porque Zapatero busca una portada con muchos empresarios, los que están en el IBEX, con la excusa de que si las grandes empresas tiran, empujarán a las pymes. Hay que estar ciego para no ver que la recuperación, la generación de empleo, sólo será posible gracias a las pymes, que son aquí el elemento fundamental para la generación de riqueza. Y hay más, sorprende que para una reunión como esta no cuenten con la CEOE que agrupa, no sólo a estas grandes empresas, sino también a las imprescindibles pymes.
Al todavía presidente de la CEOE, Díaz Ferran, que no es que sea la voz más autorizada, no le falta razón cuando muestra su enfado por la exclusión de la confederación empresarial y asegura que la situación de las empresas y las posibles soluciones a sus problemas, así como las medidas necesarias para regenerar el tejido productivo, ya han sido entregadas al Presidente y las tiene sobre su mesa de trabajo, aunque deben ser un elemento meramente decorativo porque no les ha hecho ningún caso... Es evidente que lo que pretende Zapatero el sábado es otra cosa, dar a la sociedad la imagen de que toma la iniciativa, que asume el liderazgo social y que es capaz de lograr una reunión anticrisis de la que no hay precedentes.
Si tiene tanto interés en abordar una salida a la crisis, situación de emergencia que nos afecta a todos, está muy bien que hable con los empresarios, pero ¿a qué espera para convocar solemnemente en la Moncloa al líder de la oposición?... Esta foto no interesa de momento, porque todo son intereses electorales y lo que quiere es medirse con él en el debate político público que se genera en los medios o en el Congreso de los Diputados, en las sesiones de control, para acusarle de negativismo y de no aportar soluciones... A Zapatero le interesa que triunfe la estrategia del "Comando Rubalcaba" y cuaje la imagen de un Rajoy bronco, que se niega a la colaboración y sólo volcado en los intereses electorales.
Cualquier iniciativa para salir de la crisis debe ser alentada, pero no volvamos a la practica de la política de imagen, porque no soluciona los problemas. Hay una reforma laboral por acometer y aplicar, hacen falta ajustes en los que Zapatero ni quiere pensar. Seguir instalado en el ilusionismo, el buenismo y en tantos otros “ismos”, pudo en otro tiempo darle alegrías electorales, pero en este momento le están hundiendo en un pozo del que cada vez le será más difícil salir.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Cuesta abajo y sin frenos.

Noviembre se está convirtiendo en el “mes horribilis” de Zapatero. Realmente lleva un “annus horribilis” porque salvo el respiro que le supusieron los cambios en el Gobierno, el resto ha sido ir en una cuesta abajo y sin frenos.
El balón de oxígeno que para el PSOE supuso la llegada del todopoderoso Rubalcaba, se ha ido deshinchando poco a poco y la timorata reacción ante el desmantelamiento por parte de Marruecos del campamento saharaui Dignidad, fue el suceso que acabó con la leve recuperación experimentada. Luego ha venido el batacazo de las encuestas ante las elecciones catalanas y lo más inmediato es la falta de confianza de los inversores, que ante la decisión de Irlanda de aceptar el rescate europeo, ven en España un país que tenga que recurrir a este procedimiento. La caída de la bolsa, que ya se ha olvidado de los 10.000 puntos en el IBEX y, sobre todo, la prima de riesgo española, que ya se sitúa en los 235 puntos, demuestran hasta qué punto se recela de nuestra situación y muestra cómo se ha perdido gran parte de la confianza en nuestro país.
Es verdad que nuestra situación no es como la de Irlanda, porque rescatar a España sería otra cosa. Nuestro PIB duplica al de Irlanda y Portugal juntos, pero no es menos cierto que desde Europa se nos ve como un problema, porque somos el único país de la OCDE que no mejora sus resultados. Ya sé que son indicadores y que la situación real no es  tan dramática, pero lo cierto es que sin confianza no hay dinero y sin dinero no existe recuperación. España se encuentra en ese círculo vicioso del que parece que hoy por hoy es muy difícil salir, porque hacen falta medidas más duras que este Gobierno, en tiempo electoral, no se atreve a asumir, máxime cuando tiene garantizada la estabilidad parlamentaria por la compra que ha hecho del PNV.
Lo del Sahara traerá cola interna en el PSOE, partido al que sólo le faltaba que las divergencias internas saltaran a la luz. Por otra parte, es lo que suele pasar cuando los liderazgos se tambalean y ya no es ningún secreto, que Zapatero está muy cuestionado y que cada respaldo público que le hace Felipe González, lleva aparejado “veneno político”, en el que cuando no le acusa de haber actuado tarde, lo hace de no haber tenido capacidad de adelantarse a los acontecimientos, o lo que es peor, volviendo a llevar a la escena política la guerra sucia del GAL contra el terrorismo. Veremos en lo que acaba el debate de la última reunión de la ejecutiva socialista, en la que muchos fueron los que protestaron airadamente por la reacción ante Marruecos y han pedido una tarea pedagógica de explicar a la sociedad que el gran apoyo político en España al Polisario es el del PSOE.
Y ya para que nada falte, los de la ceja abandonan el barco y ante la catástrofe que se avecina, optan por irse con IU-Los Verdes y en Cataluña, apoyar al iluminado de Joan Herrera, cuya consistencia política es difícil de encontrar y su papel en la campaña catalana inexistente... Vamos, que han dejado muy claro que su voto de izquierda, interesadamente cedido al PSOE en la anterior campaña electoral, se cambia de bando porque las perspectivas no son nada buenas y es mejor alejarse de los perdedores “por un por si acaso”.
El mesecito de Zapatero se las trae. Lo malo es que quien sufre es España y los españoles. Todo ello es la consecuencia de la falta de una política seria y rigurosa, de un programa de gobierno centrado en los problemas reales del país. Cuando la suerte te vuelve la cara, o tienes recursos o la caída es inevitable. El vacío intelectual de Zapatero estaba enmascarado, pero cuando ha dado la cara, ha llevado al país a una situación que difícilmente aguantará el año y medio que falta a las próximas generales... Tiempo al tiempo.

martes, 23 de noviembre de 2010

Felicitaciones merecidas.

No es un cumpleaños al uso, pero la fecha merece ser recordada. El 22 de noviembre, ayer, se cumplieron 35 años de reinado de Don Juan Carlos de Borbón. Lejos queda la imagen de un joven príncipe que asumía sobre sus espaldas el reto de conducir al país hacia la democracia constitucional que, con sus virtudes y sus defectos, hoy disfrutamos. La comparación de las imágenes de aquellos años con las actuales, nos permiten comprobar que no sólo la fotografía ha evolucionado hacia el color, sino que también lo ha hecho el país, aunque los años hayan hecho mella en el rostro de un monarca que, también por razones de su reciente enfermedad, aparece mayor y en ocasiones hasta cansado. Tal vez esta sea la razón por la que la Casa Real ha recargado de forma considerable la agenda de los Príncipes de Asturias que, lógicamente, deben estar preparados para asumir otro gran reto, afrontar el futuro de un país que no sabemos a ciencia cierta si es monárquico o juancarlista.
Para que evaluemos el mandato del Rey, digamos que ya tiene casi la duración de la dictadura. En un corto espacio de tiempo, España pasó de ser un país sin libertad, encerrado sobre sí mismo y aislado del mundo, a ser un país libre, abierto, con uno de los estados más descentralizados del mundo y que ha llegado a ser cabeza de las potencias de Europa e incluso con un puesto reconocido en el mundo más desarrollado. Ha sido tarea de todos, que hemos sabido mirar al frente y dejar a un lado intereses personales en aras de los colectivos. Bajo la batuta de un Rey que no ha gobernado, pero que sí ha reinado, la sociedad española ha asumido como propia una forma de regir el estado que no ha impuesto, que ha hablado y consensuado, que ha sabido tener cercanía, pero que a la vez ha sabido estar por encima de todo, incluso de las críticas de los más ácidos republicanos.
El Rey de España asumió un país con una derecha a la que se identificaba con la dictadura y una izquierda marxista y republicana hacia la médula. Ambos, sin embargo, tuvieron la responsabilidad de respetar a la Corona como árbitro, hasta el punto de que se llegó a decir que en España teníamos una “monarquía republicana” que era aceptada por todos. No hay duda de que los Reyes lo han sabido hacer y aunque ha habido fallos, que los han tenido, han sabido hacer frente con maestría a capítulos tan difíciles como el fallido golpe de estado de Tejero, los múltiples atentados asesinos de ETA, las difíciles relaciones exteriores o la matanza del 11M. La Corona ha estado siempre cerca del pueblo y ha sido árbitro en las grandes disputas políticas. Ha sido mullidora de acuerdos tan importantes como los de la Moncloa.
En el otro lado de la balanza puede haber estado el silencio en asuntos tan espinosos como los ataques nacionalistas a la unidad del Estadoo cuando el prestigio internacional de España ha estado en juego. A veces, eso ha sido un hecho, la Corona ha estado más cerca de las posiciones del PSOE que de las del PP, puede que haya sido complejo del republicano o simplemente cercanía personal, pero el caso es que la circunstancia se ha dado.
Con todo, el balance ha sido mucho más positivo y de cara al futuro, lo deseable es que el Príncipe Felipe, que ha tenido una preparación mucho mejor que la de su padre, cumpla el papel constitucional que tiene reservado. A mayor formación mayores retos, y ya lo creo que los va a tener, porque la España actual es muy diferente y los problemas que estamos viviendo no tienen precedentes. El Príncipe tendrá que moderar con mucha inteligencia, porque la situación no tiene nada que ver con la vivida. No hace falta ser muy avezada para intuir que una vez que Juan Carlos deje la Corona, los movimientos republicanos se movilizarán de forma contundente y hoy por hoy, España es una sociedad desmovilizada, que traga lo que le echen y que no parece dispuesta a defender ningún ideal. Al Príncipe le toca consolidar la Corona o dar paso a una nueva forma de Gobierno. Pero eso sólo lo dirá el tiempo... En este momento, en este cumpleaños, lo que procede es decir: “¡Gracias Majestad!”... No nos ha ido nada mal.

lunes, 22 de noviembre de 2010

En la recta final.

El arranque de la semana definitiva de la campaña catalana nos trae pocas novedades. Las numerosas encuestas que ayer se difundieron muestran una foto fija bastante evidente y con escasos cambios desde hace algunos meses. El desplome del PSC parece imparable y nada parece que sea capaz de frenar la caída.
Todos coinciden en que CiU roza la mayoría absoluta y que podrá gobernar en solitario con acuerdos puntuales, una posición francamente favorable para Artur Mas, que podría sumar apoyos de uno u otro lado a conveniencia. Todas las encuestas coinciden también en que el PP mejoraría sus resultados, con una subida de hasta 3 escaños en el mejor de los casos. Entre los perdedores está el varapalo de ERC, que de sus 21 escaños se puede quedar en 9, y destacar también el batacazo del PSC, que roza los 30 escaños en todas las horquillas. Esa es, precisamente, la barrera en la que los analistas políticos hablan de un fracaso asociado al que puede tener el PSOE a nivel nacional, lo cual hace que a nadie extrañe que ayer el presidente del Gobierno se volviera a lanzar al ruedo político para destapar su tarro de las esencias favorito: el de la extrema derecha, el de la identificación de los conservadores con la política más rancia y extremista, un latiguillo que ya cansa por vacío, por anacrónico y por miserable...
Que a estas alturas de nuestra vida política, con una democracia de 35 años, consolidada, y que ha pasado por duros y tensos momentos, tengamos que escuchar a quienes nos gobiernan desenterrar el lenguaje rancio y caduco de las dos españas, de la identificación de la derecha democrática con los movimientos de ultraderecha del mundo y con la nostalgia del pasado, demuestra hasta qué punto un dirigente político se siente acabado, vacío de ideas y noqueado para ganarse la confianza de los ciudadanos. Zapatero nunca ha sido una “maquina” de fabricar ideas, pero es que en este momento es un lastre para su partido, un lastre para la sociedad y un lastre para la imagen y el prestigio de España. Cuanto más se empeñe en utilizar este tipo de lenguaje-descalificatorio, más se le verá el plumero de su vacío de formación y de su consistencia como líder político.
También hay otros elementos en las encuestas que nos deben invitar a la reflexión. La baja participación que se espera es el más importante de todos. Ninguna encuesta llega al 55%, lo que indica lo poco que ha calado la campaña en los ciudadanos y lo alejados que se ven del debate político en Cataluña. Si a ello le unimos el suspenso clamoroso al tripartito, convendremos en que estamos poniendo fin a los cuatro años más negros de la vida política catalana, donde se han reabierto los debates de enfrentamientos entre la propia sociedad catalana y con los territorios del resto del estado. Lamentablemente, Cataluña no es más fuerte y ha perdido un tiempo precioso que ha deteriorado la vida pública hasta límites que costará restaurar.
Los videos de la semana pasada, el espectáculo del anuncio de los patrimonios de los candidatos, los insultos a otras regiones de España, han sido aspectos tan negativos que no sólo no han motivado, sino que han restado interés a los ciudadanos, sin duda mucho más encandilados por los 8 goles que a domicilio le metió el Barça al Almería... Y ojo, porque la baja participación beneficia a los partidos más pequeños que no tendrán escaños, salvo Ciudadanos, que puede mantener los suyos pero sin grupo propio, por lo que no podrá presentar proyectos legislativos. En resumidas cuentas votos, para la nada.
O mucho cambian las cosas o estamos comenzando una recta final sin grandes expectativas y que de una forma languideciente nos llevará al domingo 28-N. Los catalanes tienen la palabra.

viernes, 19 de noviembre de 2010

Desviar la mirada no lava conciencias.

Hace falta tener muy duro el corazón para no estremecerse ante las imágenes que nos llegan de Haití. No puede haber sensibilidad que no se resienta al ver el cuerpo de un ser humano moribundo en las calles de una ciudad, cualquiera que sea. Es difícil entender cómo se puede convivir con la muerte en las aceras y mirar hacia otro lado. Sin embargo, la vida allí es la de la lucha por la supervivencia, por vencer la enfermedad, por conseguir un mendrugo de pan que llevarse a la boca.
¿Cómo es posible que una sociedad que se dice desarrollada permita que pasen estas cosas? Las catástrofes naturales son imprevisibles y también sus consecuencias. Pero a partir de ahí, la mente humana es capaz de afrontar todo y sin embargo, el mundo mantiene abiertos escenarios que estremecen y que es imposible entender que se mantengan así tiempo y tiempo, mientras sesudos burócratas dilucidan qué pasa en los grandes núcleos financieros.
No quiero caer en la demagogia de culpar al capitalismo de todo lo que sucede. No lo es. Hay una economía cada vez más global que es capaz de hacer los ajustes más finos y mover las cantidades más desorbitadas, sin que veamos un sólo euro. Son las transacciones electrónicas que mueven el mundo, que están ahí y que sin verlas condicionan nuestras vidas.
Ese mundo desarrollado y tecnificado, es capaz de mover las conciencias y conseguir movimientos solidarios a golpe de movimientos de comunicación. Cuando este 2010 asomaba en el calendario, un brutal terremoto sacudió Haití y de repente, supimos la miseria en la que vivía el país, en el que la catástrofe natural segó miles de vidas. La movilización internacional fue importante. Se nos estremeció el alma al ver a los bomberos de Castilla y León arrancar de la tierra vidas de niños para los ya no había esperanzas. Aquello abrió precisamente la puerta a la esperanza para un pueblo, al que todos coincidían que no había que dar el pescado, sino la caña para pescar.
El tiempo, que todo lo puede, nos borró la secuencia de lo que allí pasaba y ahora rebrota con una epidemia de cólera que tardará mucho tiempo en ser controlada. ¿Qué ha sido de Haití en los últimos seis meses?... Pues que la miseria sigue instalada, que una gran mayoría de la población vive con dos dólares por día, que el país decrece al ritmo del 9% y que el cólera infecta las aguas, llega a los ríos y coloniza los cuerpos de los habitantes de un país que vuelve a ver la muerte en las calles. Cuerpos inertes, retorcidos, que se deshidratan y pierden con el agua la vida. Quienes llegan a los hospitales se salvan, porque el cólera hoy no es mortal, pero los hospitales están desbordados y muchos no llegan. Y mientras, ¡que ironía!, el país se debate en un proceso electoral.
Estamos en el siglo XXI, el siglo de la tecnificación, de los grandes avances, también el de las crisis financieras que no se saben ni de dónde vienen ni a dónde van. Y se mantienen las bolsas de pobreza, ese gran monumento a la hipocresía de una sociedad que se dice solidaria, porque es capaz de dar unos pocos euros y mirar hacia otro lado. Estar en la zona desarrollada no nos debería permitir lavar nuestras conciencias solidarizándonos "de boquilla" con unas imágenes espeluznantes, que son la máxima expresión de la violencia, porque encierran el secreto de la pérdida de muchas vidas humanas, que parece que no son de nadie, pero que se configuran como el gran monumento a la vergüenza de este mundo al que se llama desarrollado.