Una cosa es dialogar con los sindicatos, que es necesario, y otra muy distinta es entregarse a ellos, que es lo que está haciendo el Gobierno Zapatero. La cosa es tan clara, que en todos los círculos laborales y políticos se habla del “cuarto vicepresidente” cuando se alude a Cándido Méndez, por la frecuencia con la que visita la Moncloa.
No seré yo quién reclame conflictividad laboral en este momento, porque creo que la paz social es fundamental para la estabilidad del tejido productivo. Pero una cosa es la paz laboral y otra que los sindicatos hayan renunciado a su función, porque les han garantizado la financiación y porque sus tesis son intocables para el Gobierno... Y todo ello con casi 5 millones de parados!
Veinte meses han trascurrido desde que los agentes sociales y el gobierno empezaron a hablar del impulso al empleo, la competitividad y el progreso social. Desde entonces se suceden documentos de reforma laboral que quedan en papel mojado y que cada vez son más complejos. El último, que ayer conocieron los agentes sociales, es todavía más disperso y complejo... Disperso porque para nada entra en las nuevas modalidades de contratación que son necesarias (los sindicatos no quieren ni oír hablar de flexibilidad en la contratación) y complejo, porque la patronal va a poner el grito en el cielo, ya que se obliga a los empresarios a tener que justificar por qué contratan temporal y no indefinido. Lo único que se produce, es un tímido avance en la modalidad de fomento del contrato indefinido, con un despido de 33 días, de los cuales 8 los asume la administración.
Así no podemos seguir. O se ponen sobre la mesa nuevas formas de contratar o es imposible generar empleo. Al Gobierno le sale sarpullido cada vez que se habla de abaratar el despido, por lo que de inmediato pone en marcha el "latiguillo" de que es la derecha la que quiere echar a los trabajadores sin pagarles un euro. Esa demagogia está llevando al país a una situación laboral que estremece, porque el paro sigue creciendo y las perspectivas no permiten aventurar la creación de nuevos empleos.
Zapatero tiene la obligación de entrar a fondo en la reforma laboral y ajustarla a los tiempos en los que vivimos, a las economías más desarrolladas... No hay nada más asocial que la política que no crea empleo y a ella es a la que nos está llevando este gobierno, que luego va de adalid de defensa de las políticas sociales.
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Muy buenas, Doña Mireia.
ResponderEliminarToca usted un tema muy delicado con el tema de la financiación que nutre a los sindicatos mayoritarios. Digo que es delicado porque eso precisamente es lo que hace que un sindicato se aleje un poco de su esencia o razón de existencia. No se puede ser libre (si de algo sirve abanderar lo libre) si tienes pesebre, lleva usted razón.
Por otra parte, no creo que la coyuntura actual sirva para sacar pecho reivindicativo a los sindicatos, y no lo digo por la crisis, más bien lo digo por las economías que ayer llamábamos emergentes -dígase India y China- hoy se consideran potencias, con algún matiz, eso sí. No se me olvide decir que alguna multinacional que radica por estas tierras siempre se sacará de la manga el hecho de mudar a oriente por aquello de los costes laborales.
Digo esto porque en estas sociedades orientales el sistema de libertades -aquí incluyo a las sindicales- son una cuestión utópica.
Quizá el justo equilibrio, aquí, estaría en dar más importancia al trabajo, pero también se tienen que articular los cauces necesarios para que el trabajador se sienta más vinculado en la empresa para la que trabaja. Digamos que esto del mercado laboral está lleno de zonas grises en las que todos tienen sus razones y pocos razonan la realidad del devenir.
Un placer saludarla.
Fdo.: J.Robles.
P.S.: Sigue siendo usted un bellezón.
Es un eufemismo hablar de sindicatos en España. Son una comparsa y como dien dicen, acabarán siendo empresas públicas dependientes de un ministerio. Son una vergüenza para los trabajadores y una miseria para el país. Su análisis es coprometido y potente y debería ser leído por los que todavía confían en estos tragones.
ResponderEliminarUn saludo Mireia.
Los sindicatos son necesarios y tienen un papel imprescindible. Otra cosa es que lo ejerzan, pero no debemos satanizarlos. Los dirigentes actuales pasarán y las organizaciones seguirán. Al igual que hay crisis en los partidos, la hay en los sindicatos, y nadie se cuestiona que los partidos desaparezcan o sean el cáncer de la democracia. Así que es injusto culpar de todo a los sindicatos. En todo caso a los dirigentes en un momento como el actual.
ResponderEliminarUn saludo y ánimo.
Qué piensas de la nueva tarea de los sindicatos organizando actos en solidaridad de Garzón?. ¿Es este el papel de estos zánganos cuando hay tantos millones de parados?.
ResponderEliminarTienes razón, estamos a las puertas del nuevo ministerio de agitación y propaganda.
En el moderno tiempo en el que vivimos es un grae error contraponer empresa y trabajadores. Deben ir unidos, fortaleciéndose unos a otros. Sólo así se asisnta el tejido productivo. Los trabajadores deben tener las mejores conquistas en una empresa productiva y rentable, que gane dinero. Creer que las empresas son hermanitas de la caridad es no tener ni idea de economía. Las empresas deben ganar dinero y así es como se genera empleo. El paro conduce al caos, a la crisis. Si no se genera paro se acentua la crisis. Es un proceso de retroalimentación que solo se puede romper trabajando más.
ResponderEliminarHemos vivido por encima de nuestras posibilidades y lo estamos pagando. Es hora de apretarnos el cinturón y reconocer que para mantener el trabajo hay que sacrificarse mucho. O lo tomamos o lo vamos a pagar muy caro.
Enhorabuena sra Mireia por su trabajo. Como bien dice el sr Robles, es unted una gran belleza y además muy inteligente en lo que dice. Da gusto con personas así. Le animo a que nos siga dando sus puntos de vista, porque siempre enriquecen.
Perdón, Don Carlos, pero yo la ví primero.
ResponderEliminarNaaada, déjelo, fue una licencia. Quede usted abrazado al gusto.
Hablando en serio. A esta puñetera vida que llevamos hay que darle un poco de humor, he ahí el porqué de la licencia.
A ver si de verdad el PP pone en marcha mecanismos de regeneración interna. Usted que está tan metida en el partido, debería mostrarles las recetas que aquí prescribe, porque toda la política necesita una profunda regeneración y ganar adeptos entre los ciudadanos. Mire, Rajoy deja pudrir los problemas y sólo actúa cuando la situación es insostenible. En Gürtel está esperando a que pase la tormenta y cree que con lo de Barcenas y Merino la cosa queda muy descapitalizada. Una lástima este dirigente popular.
ResponderEliminarEn primer lugar Doña Mireia quiero presentarle mis respetos porque sus comentarios son acertados, escritos desde la proximidad a un partido, pero con una educación y ponderación que hay que reconocer. En segundo lugar, mi admiración, porque usted parece expresarse sin ataduras.
ResponderEliminarPermítame que le diga que su apreciación sobre los sindicatos es compartida por una gran mayoría de españoles. Parece que son intocables porque la sociedad en que vivimos se guía por aquello que se encaja en lo moderno, y lo moderno es estar de acuerdo con lo que se entiende como políticamente correcto. Por eso que usted exprese en voz alta lo que tantas pensamos es digno de tener muy en cuenta.
Le pregunto, si me lo permite, ¿qué piensa de que los sindicatos estén más pendientes de cuidarse a si mismos que a los trabajadores?. ¿No le parece una vergüenza que se defiendan más los interese personales, el de los liberados que son una verdadera legión, que de los intereses colectivos?¿Usted cree que se atreverán a convocar una huelga general a Zapatero?. Son preguntas que dejo en el aire, por si le valen para hacer algún post.
Mucho ánimo y no pierda su valentía. Si actitudes como la suya se dieran mas en el PP, este partido sería algo muy distinto.
Enhorabuena Mireia.