Las consecuencias de un gobierno achicharrado.

Dice el refrán que “no hay peor ciego que el que no quiere ver, ni peor sordo que el que no quiere oir”... Hace falta tener cuajo para decir que los 82.132 parados que se han sumado en el mes de febrero en España, son un paso más del reajuste del mercado laboral que tenemos. Maravillas Rojo, la Secretaria General de Empleo ha dicho esta mañana que este "reajuste" confirma una “desaceleración” porque el incremento ha sido menor que el del mismo mes del año pasado... La realidad, sin embargo, es brutal: es el séptimo mes consecutivo en el que el paro aumenta; y en el último año se han sumado casi 650.000 parados, un 18,6% más.
Con estos datos, hablar de desaceleración es una broma de muy mal gusto, un intento de engaño a los ciudadanos y torticera declaración que revela la impotencia gubernamental para abordar el mayor de los problemas a los que se enfrenta nuestro país.
Cada vez que la estadística del paro se hace pública, se sube otro peldaño más de las campañas de optimismo de Zapatero, de los recurrentes latiguillos de que “vamos mejorando”, del “hemos tocado fondo”,o de que ya “asoman signos de recuperación”... La comisión anti-crisis que capitanea Blanco lo tiene muy difícil, porque nace de un gobierno sin ideas, sin capacidad de respuesta e incapaz de entender que para resolver los problemas de nuestra economía, no sólo debe haber una recuperación global, sino que hay que tomar medidas estructurales valientes, que ni siquiera son capaces de proponer.
El documento de intenciones presentado a la comisión ayer, que prevé crear 300.000 nuevos puestos de trabajo, sólo es un "refrito" de medidas que han propuesto, en muchos casos, partidos como el PP o CiU en el Congreso. Son medidas que pueden dar sus frutos a corto, pero que para nada reforman nuestro tejido económico. Parece como si el Gobierno quisiera prolongar sine díe los planes inmediatos como el Plan E, que dan frutos coyunturalmente, pero que cuando se acaban se desanda el camino recorrido.
Nuestro problema interno es muy grave, porque el paro avanza inexorablemente, pero también nos va en ello el prestigio internacional, porque lamentablemente hoy volveremos a estar en los foros económicos de toda Europa como el país que no avanza y que se enquista en la crisis....Y es que 4.130.625 desempleados, son muchos...Más de los que podemos soportar.