BLOG DE MIREIA ARROYO DE LA PARTE

Un vistazo crítico y personal a la actualidad.

lunes, 2 de mayo de 2011

Clamoroso fracaso del 1º de mayo.

Los sindicatos deberán analizar por qué en un país de 4.910.000 parados, la jornada reivindicativa del 1 de mayo ha sido un estrepitoso fracaso. O tal vez deberían de preguntarse qué deben hacer para transformarse en unas organizaciones modernas, eficaces para los trabajadores y con capacidad de aportar valor añadido a la sociedad civil.
La crónica sindical del 1 de mayo es la crónica del fracaso de unas organizaciones caducas, ancladas en el pasado, representantes de una izquierda rancia, caduca, que ya no suscita ningún interés ni seguimiento por parte de los trabajadores. Veremos si estos mismos sindicatos dentro de un año, cuando hayan pasado las elecciones generales y previsiblemente haya un cambio de Gobierno, mantienen la docilidad actual y no se dedican a ahogar a un Gobierno que obligatoriamente tendrá que realizar importantes ajustes. Estoy por asegurar que si hoy en día el PP fuera el partido que gobernara y hubiera hecho los recortes sociales que ha hecho Zapatero, los sindicatos ya se habrían lanzado a la calle y hubiéramos tenido movilizaciones generales de todo tipo y condición. Sin embargo, hasta ahora se han limitado a agachar la cabeza y procurar dejarse ver lo justo, algo que hay que reconocer que es bueno para no calentar el ya preocupante clima social en el que estamos viviendo.
No deja de sorprender que para enmascarar lo que ya se preveía como un gran fracaso, la manifestación tradicional del 1 de mayo de Madrid, los sindicatos se la llevaran a Valencia y se dedicaran a criticar el trabajo del Gobierno de aquella comunidad en materia laboral con denuncias por los altos índices de paro. Ya es casualidad, precisamente en Valencia, cuando hay comunidades como Andalucía que superan el 30% de paro y tres de sus provincias superan el 33%... Pero en su estrategia llevaron su fracaso, porque al margen de las habituales guerras de cifras, lo cierto es que en ningún caso los manifestantes llegaron a los 10.000. Lo mismo se puede decir de los resultados de las manifestaciones en otros puntos de España.
No trato de hacer un alegato contra los sindicatos, que creo que tienen su papel, aunque no es el que ahora desempeñan y estoy convencida de que no pueden seguir por este camino. Lo que trato es poner de manifiesto el grado de desmovilización social al que ha llegado España, algo realmente preocupante, porque si por el paro no hay una alta movilización, por pocas cosas podrá haberla... Y es que Zapatero ha hecho muchas cosas mal, pero lo más grave es que ha provocado tal nivel de hastío y de desconfianza social, que los ciudadanos se han vuelto pasotas y son incapaces de responder a la más mínima llamada reivindicativa. La mejor prueba es la movilización sindical que tradicionalmente ha sido muy activa y que estoy segura que se reactivará si gana las elecciones el PP, lo que pondrá en evidencia el chanchullo y la pantomima de su función actual al servicio de un Gobierno que les ha dado todas las prebendas posibles y financia aparatos endogámicos que sólo están pendientes de salvar su tipo y muy poco del clima general del país.
Todo ello se ha producido en un domingo de nuevas encuestas que muestran el deseo de cambio de los españoles, mientras Zapatero es capaz de irse a Las Palmas, una de las provincias con mayor índice de paro del país, a decir que él no es el responsable del paro y sacudiéndose el polvo de la crisis internacional, como si él no pudiera hacer nada para intentar atajarla.
Un país con 5 millones de parados es inviable, porque si falta el trabajo falta la gasolina para el sostenimientos de los servicios públicos. Es imprescindible poner los mecanismos para acometer las reformas que permitan que la recuperación económica llegue. España no puede perder el tren de la recuperación que ya tienen otros países, porque si no hay cotizantes se ponen en peligro las pensiones, las prestaciones y los servicios sociales. Hemos perdido ya casi dos años y aquí seguimos penando mientras en Europa emergen. Alemania tira de la locomotora y sólo tiene un 7% de paro. Nosotros estamos en el 21,2%. Las cifras hablan por sí solas y no hay que hacer muchos más comentarios.
Lo único que ahora soy capaz de preguntarme es qué pensarán los sindicatos en el día después. Tal vez no piensen nada y se limiten a dejar pasar el tiempo por aquello de hacer real el dicho de: “ande yo caliente...”

7 comentarios:

  1. No es una gran sorpresa este fracaso porque los sindicatos están pasados y son incapaces de conectar con la realidad social del país.Sirven al Gobierno y no tengas ninguna duda Mireia en que si el PP llega a gobernar les van a montar todo tipo de conflictos.Lo que tiene que hacer el PP nada más llegar es cortar el grifo del dinero a estas organizaciones que solo están pendientes de que sus responsables vivan y vivan bastante bien.

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  2. Qué razón tienes en que los sindicatos son lo más rancio de la izquierda española,pero eso también nos lleva a afirmar que el PSOE es la izquierda que se beneficia de esa ranciedumbre.Los sindicatos tal y como están concebidos sólo sirven como grupos de presión al servicio de quién paga y como Zapatero se ha cuidado muy mucho de llenarles los bolsillos con todo tipo de ayudas,ahora recoge la cosecha del apoyo y ayer las manifestaciones fueron contra la política laboral de los gobiernos del PP y lo vimos en Valencia y también en Madrid.Hay que acabar con este clientelismo sindical que tanto daño hace a la democracia.

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  3. Tu análisis es impecable pero no creo que surta efecto hasta que no haya un cambio de gobierno.El PP tendrá que ser valiente para cambiar las condiciones de los sindicatos porque como trate de confiar en ellos solo va na encontrar un camino sembrado d trampas.Lo expresas muy bien en la izquierda rancia a la que representan,pero al tiempo se resisten con gran fuerza a perder la cuota de poder y tratarán de mantenrla con quién venga.Por eso no son de fiar porque desde la izquierda no se va a apoyar jamás a la derecha y va a haber problemas.

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  4. Van a lo suyo,solo a lo que les interesa y no tengas duda de que no se van a parar a analizar lo que ha pasado este fin de semana.Podías haber completado el refran porque estos son de los de ande yo caliente y ríase la gente.Lo cumplen porque se rien de todos nosotros y al tiempo mantienen todos los privilegios que para sí quisiera cualquier trabajador.Parece mentira que haya gente tan cara duda en un momento tan difícil.

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  5. Hace falta tener jeta para llevarse la manifestación nacional a Valencia y no hacerla en Andalucía donde 1 de cada tres personas están paradas.Esto demuestra que los sindicatos lo que hacen es política y cargan las tintas contra el PP de Valencia que es uno de los objetivos a batir de cara a las elecciones.Con esta conciencia social es imposible generar un estado de confianza que permita crear estructuras fuertes para el futuro.

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  6. Tienes mucha razón Mireia cuando hablas de la desmovilización general del país.Es algo a lo que muchos no le dan importancia y sin embargo a mi me parece fundamental,porque un país sin inquietudes,conformista y pasota es incapaz de encontrar el impulso para sacar adelante sus proyectos y para encontrar soluciones.Es lo que yo llamaría ambición a la que creo que España ha renunciado para dejarse llevar por los acontecimientos.La universidad está pasota,lo son los sindicatos,los empresarios defienden en muchos casos la economía sumergida y así no podemos sacar nada positivo.

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  7. Un buen artículo Mireia que cuenta verdades de unas organizaciones parásitas que no están cumpliendo el papel para el que nacieron.Hay que hablar tan claro como tu lo haces en tu comentario de hoy y descubrir a estos grandes farsantes que se están aprovechando del gobierno con el permiso de unos trabajadores que son cada vez menos capaces de pedirles las responsabilidades que tienen que tener.

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