BLOG DE MIREIA ARROYO DE LA PARTE

Un vistazo crítico y personal a la actualidad.

lunes, 18 de abril de 2011

El tercer problema...

No es justo que paguen justos por pecadores. No es justo que por unos pocos se juzgue a una mayoría. No es justo que el trabajo de muchos lo destrocen unos pocos. No es justo generalizar... Es una costumbre muy española, puede que también de muchos países en el mundo, pero la verdad es que no responde a la realidad y suele llevar a conclusiones muchas veces, erróneas.
Conozco la política y la vivo de cerca. Conozco a muchos políticos y sé lo que sienten y cómo se sienten. Son hombres y mujeres entregados, sacrificados, personas que todos los días estudian y sacan tiempo de donde no tienen, para poner en marcha nuevas ideas, para buscar soluciones, para trabajar por una sociedad en la que creen y a la que saben que pueden aportar.
No es justo para los políticos, como tampoco lo es para los funcionarios, pues son muchos los que están orgullosos de ser servidores públicos. España se pone en marcha cada día gracias a cientos de miles de hombres y mujeres que desde sus puestos de trabajo, desde el hogar, desde sus estudios, dan lo mejor de sí mismos para que las cosas marchen, para tener los mejores resultados. Nadie nos ha regalado nada y si hemos llegado a ser una potencia mundial, es porque hemos trabajado, nos hemos empeñado en dar lo mejor, en formarnos, en responder a las demandas, en estar al día y a la vanguardia en todo.
¿Dónde están los modélicos políticos que hicieron la transición? No los podemos borrar de un plumazo... ¿Dónde están los miles de concejales y alcaldes que han cambiado las ciudades y pueblos de España? Están, por supuesto que están, y su trabajo no puede quedar empañado. Son personas que restan de su tiempo en la familia, con los amigos y hasta en el trabajo para dedicarse a lo público, hacen de la calle su despacho, reciben 24 horas al día y no tienen descanso porque además de vecinos, son responsables de las instituciones de su entorno.
España es hoy un modélico país descentralizado. Con sus pros y sus contras, que los hay, el Estado de las Autonomías ha funcionado y ha sido eficaz. Muchos asuntos se han resuelto por la mayor cercanía de las instituciones. Es verdad que se han producido evidentes desajustes y abusos de gestión en algunas comunidades, y nadie duda que es necesario hacer reajustes y redefinir funciones.
España, al margen de los aciertos y errores en la gestión, es un gran país. Afortunadamente estamos lejos de Irlanda o Grecia, incluso de Portugal, y las posibilidades de que nos intervengan son lejanas. España es fundamental para la estabilidad del Euro, y ese es un trabajo que hemos hecho todos, también los políticos. Tenemos una sanidad pública que es referencia en el mundo entero, una red de carreteras moderna, la mayor red de alta velocidad ferroviaria de Europa, un número excesivo (es verdad) de aeropuertos y somos una potencia en el turismo, en la cultura y en el deporte. Todo ello se debe al trabajo de todos y a la gestión que han realizado y realizan hombres y mujeres que se dejan la piel, y eso es literal, para ser un país moderno. En general, la política española ha tenido brillantes ejemplos de gestión, aunque en este momento sea algo de lo que no podemos presumir.
Pero no todo es tan bonito, es verdad, y junto a esas personas entregadas y trabajadoras, hay garbanzos negros que han manchado, ¡y de qué forma! la vida política. Han usado el poder como un cortijo, han metido la mano en la caja, han gobernado con un feudalismo impropio de los momentos actuales y han hecho del nepotismo y del amiguismo un método de vida. Son aquellos políticos que no han entrado en la vida pública para servir, si no para servirse. Son aquellos que no tienen más amigos que la política, que han perdido su condición de persona, que es lo más grande que un ser humano tiene, para ser un cargo, para acumular poder, para mantener un estatus que serían incapaces de lograr por cualquier otra vía profesional. Son los trepadores y los que buscan el enriquecimiento personal, quienes han envilecido la política, quienes han hecho de su capa un sayo y quienes actúan con un desprecio hacia la sociedad que están haciendo pagar a una gran mayoría honesta, trabajadora y honrada.
Echemos un vistazo a los datos, veamos los miles de cargos públicos, veamos cuántos están implicados en asuntos turbios. Una minoría muy minoritaria... Los partidos políticos están obligados a hacer un ejercicio de limpieza, de exigencia de manos limpias, de techo de cristal. Si se cede al chantaje de las ovejas negras, muy pronto todo estará contaminado. Los partidos y la sociedad no pueden consentir que su clase dirigente sea el tercer problema del país. La política en si misma es una actividad noble, que exige vocación, dedicación y entrega. Quien siente esta llamada no hay derecho a que pueda estar señalado con el dedo. Los políticos son necesarios... Algo se está haciendo rematadamente mal y es una canallada para quienes desde la dedicación, la honestidad y la entrega se dejan lo mejor de sí mismos cada día. Son la gran mayoría. Hay que frenar esta gran injusticia con ellos.

9 comentarios:

  1. Los culpables son los partidos políticos que son miedosos en la toma de decisiones.Por eso en la política es en la única actividad donde el chantaje funciona.El día que funcione la limpieza en todos sus extremos y los ciudadanos vena generosidad en los políticos,renuncia en quienes ejercen el liderazgo en las instituciones,ese dia la política habrá entrado en el buen camino.Suscribo que es una injusticia igualar a todos,pero cuando las cosas van muy mal siempre se buscan culpables y si además hay líderes que son unos sinvergüenzas,como el caso Chaves,no se puede pedir a quién lo pasa mal que lo comprenda.Que lo quite el partido y de ejemplo o que expolique las cosas,pero suele pasar que ni una cosa ni otra y eso es lo que es el tercer problema.

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  2. Con lo que estamos pasando y ayer hemos sabido que el Senado se ha gastado ya más de 80000 euros en traducción imultanea,para que se pongan auriculares quienes entienden perfectamente la lengua que se habla en España,es una demostración de por qué los políticos son el tercer problema de España.Suma y sigue Mireia y así no podemos seguir hay 5 millones de personas sin empleo y unos señores se dedican a jugar con los auriculares.Lo consienten los partidos y sus miembros no se rebelan.No se generaliza tanto,hay una permisividad excesiva por todos y eso es lo que hace que la situación de fama de los politicos esté en los mínimos en los que se encuentra.

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  3. Deberían ser todos esos personajes anónmimos que trabajan y sustentan la política de verdad de los partidos los que reclamaran que no se consintieran todos los desmanes que practican esos pocos.Hay un dicho que dice que la mujer del Cesar no sólo debe ser honesta,sino que además debe parecerlo.A los políticos les pasa lo mismo y a veces tengo la impresión de que chulean de todo lo contrario.Solo se que así como estamos no podemos seguir y que los partidos deberían resolverlo.

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  4. Se necesita una regeneración política y no es justo que quienes han trabajado y lo hacen con honestidad se vean reflejados en los Chaves,Camps y compañía. Flaco favor hacen los partidos poniendo en sus listas y dejando mandar,que es todavía más grave,a a personas que está demostrado que han abusado del poder y que si no lo han hecho más es porque no han podido.En la vida siempre pagan los justos porque ellos hacen las cosas bien,a la cara,mientras que los sinvergüenzas son ladinos y actuan a espaldas y siempre en su provecho.La política ha entrado en una mala deriva de la que tiene que salir por el bien de toda la sociedad.

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  5. Creo que hoy has hecho un magnífico artículo,con gran realismo y haciendo justicia a la situación,pero también te digo que me parece que la sociedad tiene tan interiorizado que todos los políticos son iguales,que no se paran a pensar lo que hoy tan bien reflejas,que hay muchas personas que trabajan con dedicación y con honestidad por el bien común.Que rompas una lanza a favor de ellos me parece extraordinario.Siempre nos demuestras que hay sentido común en la política y eso como no abunda mucho,se agradece.

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  6. España necesita hoy más que nunca una clase política valiente y comprometida con la solución de los problemas que nos angustian.

    Eso sólo será posible si restablecemos el valor social del trabajo político, no puede ser que algo tan importante cómo la Educación o la Sanidad no estén en las mejores manos, pero cómo queremos que se dediquen los mejores a la política si continuamente los estamos denigrando ?

    Hay que distinguir muy bien y no generalizar, el que cometa un delito en la gestión del dinero público a la cárcel si se prueba, pero el resto ( son la inmensa mayoría ) se merecen el mejor de nuestros respetos.

    Otra vez aciertas al a elegir el tema de tu post Mireia, ojalá los medios de comunicación "tradicionales" salieran de su endogamia y promovieran debates cómo los que tu planteas hoy.

    Saludos afectuosos

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  7. De acuerdo con JR en que necesitamos a los políticos y estoy contigo Mireia en que la mayoría son trabajadores y honestos.Pero estos políticos no se ven,están siempre en un segundo lugar.Seguramente porque se dedican a trabajar y no a salir en la foto.Los partidos deben poner en la primera línea a políticos con liderazgo social y moral y no permitir que en esa línea haya políticos bajo sospecha,porque si hay una sospecha es porque han dado pie a ella y aquí aplicaría yo aquello de que cuando el rio suena es que agua lleva.

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  8. Excelente artículo Mireia que pone las cosas en su sitio.A ver si de una vez los partidos se dan cuenta de que no pueden dejar que se pudran todos por culpa de unos pocos que son los que mangonean.Los partidos deben darse cuenta de que hay unas bases a las que hay que escuchar y no solo tenerlas ahí para pagar las cuotas.Los tiempos en el poder son fundamentales para acabar con las malas practicas y cuanto más se tarde en limitar los mandatos mucho peor.Es una gozada tu forma de pensar Mireia y te doy las gracias por permitirnos el lujazo de leerte.

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  9. Gracias por salir en defensa de los funcionarios porque también somos injustamente valorados por culpa de algunos desalmados que no son capaces de entender que es el servicio de lo público.En nuestro caso no nos acusan de quedarnos con nada,pero dicen de nosotros de todo y te aseguro Mireia que una gran mayoría somos personas que estamos orgullosos de trabajar para la administración y nos ha costado mucho conseguir sacar la oposición.Tu reconocimiento es de agradecer.

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